Aproximadamente uno de cada cinco estadunidenses perdió a un familiar o amigo cercano por el coronavirus, lo que destaca la división entre dolor y esperanza mientras el país ansía volver a la normalidad un año después del inicio de la pandemia.
Una encuesta de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research difundida el jueves ilustra cómo está preparado el escenario para una recuperación de dos niveles. La preocupación del público por el virus ha caído a su punto más bajo desde el otoño, antes de que las vacaciones ocasionaran un aumento vertiginoso de los casos en el nuevo año.
Pero las personas que aún están de luto expresan su frustración por la continua lucha por mantenerse a salvo.
“No tuvimos la oportunidad de llorar. Es casi como si hubiera sucedido ayer para nosotros. Todavía está fresco”, dijo Nettie Parks del condado Volusia, Florida, cuyo único hermano murió de covid-19 en abril de 2020. Debido a las restricciones de viaje, Parks y sus cinco hermanas aún no han celebrado un homenaje.
Parks, de 60 años, dijo que se retiró de su trabajo de servicio al cliente en 2020 en parte debido a la preocupación por la exposición al coronavirus, y ahora observa con pavor cómo más estados y ciudades relajan las reglas de salud.
El sondeo también muestra que solo tres de cada diez estadunidenses están muy preocupados de que ellos mismos o un miembro de su familia se infecten, en comparación con cuatro de cada diez en los últimos meses. Aún así, la mayoría está al menos algo preocupada.
“Están bajando la guardia y no deberían”, dijo Parks. “La gente tendrá que darse cuenta de que esto no va a ninguna parte. No ha terminado”.
El número de víctimas por covid-19 ya supera los 527 mil muertos en Estados Unidos y sigue aumentando.
JLMR