El jueves, un juez restableció las protecciones federales para los lobos grises en gran parte de Estados Unidos, luego de que los lobos quedarán expuestos a la cacería intensiva, tras la eliminación de las restricciones por parte de la administración de Donald Trump, provocando que la especie de lobos grises volviera a estar en peligro de extinción.
Los defensores de la vida silvestre habían demandado a la agencia el año pasado. El fallo no afectó directamente a los lobos en el norte de las Montañas Rocosas de Idaho, Montana y Wyoming y partes de varios estados adyacentes.
Debido a que los lobos de esas áreas permanecen bajo la jurisdicción estatal después de que el Congreso levantara las protecciones federales en esa región la década pasada. Sin embargo, los abogados de la administración de Biden defendieron la ley de Trump al eliminar las protecciones hacia los lobos grises.
Argumentando que los lobos eran lo suficientemente “resistentes” para recuperarse en número, incluso cuando su población se reducía drásticamente por la caza intensiva.
Sin embargo, el futuro de la especie está en juego, luego de su exitosa e histórica recuperación, tras ser declarados en peligro de extinción.
Los grupos defensores de la vida silvestre dijeron que la orden del juez detendría de inmediato la caza en la región de los Grandes Lagos, donde los funcionarios de Wisconsin habían sido criticados después de que una cacería de lobos el año pasado superó las cuotas del estado, matando a 218 lobos en cuatro días.
La portavoz del Departamento del Interior, Melissa Schwartz, dijo que la agencia estaba revisando la decisión del jueves y no ofreció más comentarios. Los ataques de lobos al ganado son poco comunes, pero pueden causar un daño económico significativo a los agricultores cuando sus vacas u ovejas son atacadas por los lobos.
Mientras que en algunos lugares, los lobos han reducido el tamaño de las manadas de alces y ciervos, su presa natural. Por lo que ha despertado la ira entre los cazadores que se dirigen a los animales de caza mayor.
La Federación Estadounidense de la Oficina Agrícola, la Asociación Nacional del Rifle y otros grupos de la industria instaron al juez a no restaurar la protección federal, manteniendo a los lobos bajo el control de los funcionarios estatales que permiten la caza de lobos.
wgp