El canciller de Honduras, Enrique Reina, pidió este sábado que se aplique "todo el peso de la ley" tras la matanza de cinco ciudadanos hondureños, incluido un niño de ocho años, ocurrida en Texas, Estados Unidos.
"Exigimos se aplique todo el peso de la ley contra el o los responsables de este crimen", dijo Reina al dar sus condolencias a los familiares de las víctimas en un tuit reproducido por medios hondureños, y señaló que se instruyó al Consulado "contactar con las autoridades y dar seguimiento cercano al caso".
Señaló además que se instruyó al Consulado hondureño "contactar con las autoridades y dar seguimiento cercano al caso".
El sheriff Capers señaló que todas las víctimas habían recibido disparos "desde el cuello hacia arriba, casi estilo ejecución, básicamente en la cabeza".
Los agentes encontraron a "varias otras personas en estado crítico por múltiples heridas de bala", dijo la oficina del sheriff en una publicación de Facebook. Tres fueron hospitalizados.
El sospechoso "había estado bebiendo y dijo: 'Haré lo que quiera en mi patio delantero'", explicó Capers.
"Todas las víctimas eran de Honduras", dijo el sheriff, y agregó que 10 personas estaban en la casa en ese momento.
El tiroteo en Texas parece ser el último de una serie de matanzas ocurridas en situaciones cotidianas: un hombre que golpea la puerta equivocada, una porrista que se sube a un auto que no era el correcto, alguien que conduce por error hasta una entrada que no era la suya, una pelota que rueda hacia el patio de un vecino.
ledz