Las líneas eléctricas de Pacific Gas & Electric provocaron el incendio ‘Dixie’ del verano pasado en el norte de California que arrasó cinco condados y quemó más de 1.300 casas y otros edificios, dijeron el martes los bomberos estatales.
El incendio fue causado por un árbol que golpeó las líneas de distribución eléctrica al oeste de una presa en Sierra Nevada, donde comenzó el incendio el 13 de julio, según investigadores del Departamento de Silvicultura y Protección contra Incendios de California.
Cal Fire dijo que su informe de investigación fue enviado a la oficina del fiscal de distrito del condado de Butte, que determinará si se deben presentar cargos penales.
El hallazgo no fue una sorpresa. PG&E ha sido culpado de varios de los incendios forestales más grandes y mortíferos de California en los últimos años y ya había indicado que su equipo pudo haber estado involucrado en el incendio Dixie, que quemó casi 1 millón de acres (3.900 kilómetros cuadrados) en Butte, Plumas, Lassen, Shasta, y los condados de Tehama.
En septiembre pasado, PG&E fue acusada de homicidio involuntario y otros delitos porque su equipo provocó el incendio Zogg en septiembre de 2020 que mató a cuatro personas e incendió unas 200 casas al oeste de Redding. Los investigadores culparon a un pino que cayó sobre una línea de distribución de PG&E. La empresa podría recibir una fuerte multa si es declarada culpable.
La empresa de servicios públicos se declaró culpable en 2019 de 84 cargos de homicidio involuntario por un incendio de 2018 provocado por su red eléctrica descuidada durante mucho tiempo que casi destruyó la ciudad de Paradise y se convirtió en el incendio forestal más mortífero de Estados Unidos en un siglo.
PG&E también se acogió a la protección por quiebra en 2019 después de que ese incendio y otros fueron atribuidos a su equipo envejecido. La empresa de servicios públicos salió de la bancarrota en 2020 y negoció un acuerdo de 13.5 mil millones de dólares con algunas víctimas de incendios forestales.
mg