El Ayuntamiento de Seattle aprobó las propuestas que reducirían las vacantes del Departamento de Policía en hasta 100 agentes mediante despidos y deserción, una acción apoyada por manifestantes que marcharon en la ciudad tras el homicidio de George Floyd en Minneapolis, pero fuertemente criticado por la alcaldesa y la jefa de policía de la ciudad.
Las medidas, que recortarían al menos de 4 millones de dólares del presupuesto anual de 400 millones del departamento este año, fueron aprobadas por unanimidad del comité la semana pasada. El lunes, solo el concejal Kshama Sawant votó en contra del paquete presupuestario, diciendo que "no se hace lo suficiente para desfinanciar a la policía".
Seattle tiene actualmente alrededor de mil 400 agentes de policía y las reducciones se quedaron muy por debajo del recorte del 50 por ciento al departamento que buscan muchos manifestantes del movimiento Black Lives Matter. Varios miembros del Consejo dijeron que los cambios eran un punto de partida en un largo proceso para reinventar la vigilancia policial y la seguridad pública.
El ayuntamiento también recortó el salario anual de aproximadamente de 285 mil dólares de la jefa de policía, Carmen Best, y el salario de otros líderes policiales de alto nivel, aunque los recortes finales al salario de fueron significativamente más modestos que los aprobados la semana pasada.
“Si bien no podemos hacer todo en este paquete de reequilibrio de verano, hemos establecido el camino hacia adelante para un gran trabajo frente a nosotros como concejo y como ciudad”, dijo la concejal Teresa Mosqueda.
La alcaldesa, Jenny Durkan y la oficial Best habían instado al Consejo a ralentizar sus discusiones sobre los presupuestos de la policía, diciendo que el tema podría abordarse en serio cuando se considere el presupuesto de la ciudad de 2021. También dijeron que cualquier despido se dirigiría de manera desproporcionada a los oficiales más nuevos, a menudo contratados de minorías, e inevitablemente conduciría a demandas.
Durkan ya ha destinado alrededor de 20 millones de dólares en ahorros del presupuesto de la policía este año, en gran parte debido a la reducción de ingresos en medio de la pandemia de covid-19. El mes pasado, la alcaldesa esbozó un plan para reducir el presupuesto de la policía en alrededor de 75 millones el próximo año transfiriendo a los oficiales de policía de sitio, el centro de llamadas al 911 y otras áreas fuera del departamento.
Como fiscal de los Estados Unidos en Seattle, Durkan impulsó previamente una investigación del Departamento de Justicia hallando que los oficiales actúan demasiado rápido para usar la fuerza, lo que llevó a un decreto por consentimiento del gobierno federal en 2012.
Las revisiones realizadas por un monitor independiente han determinado que los cambios bajo el decreto de consentimiento han llevado a una disminución en la frecuencia con la que la policía usa la fuerza. Pero los críticos han dicho que las acciones del departamento durante las recientes protestas muestran que no se ha avanzado lo suficiente.
dmr