Los responsables financieros del Grupo de las Siete naciones más ricas comenzaban el jueves una reunión en Japón marcada por un pulso por el techo de deuda en Estados Unidos y el riesgo de una suspensión de pagos como una de las mayores amenazas para la economía global.
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, dijo que una de sus prioridades en Niigata, una ciudad portuaria en la costa del Mar de Japón, sería recalcar la importancia de resolver la disputa por la deuda nacional en la mayor economía del mundo.
“Una suspensión de pagos es francamente impensable”, dijo a la prensa antes de la reunión general. “Estados Unidos nunca debe suspender pagos. Supondría una catástrofe”.
La pelea en torno al gasto amenaza con que el gobierno no pueda pagar a los maestros de escuelas, la atención médica para veteranos y prestaciones cruciales para muchos estadunidenses, dijo. También socava el liderazgo económico estadounidense.
Durante su estancia en Japón, Yellen también tenía previsto tranquilizar a sus homólogos sobre las recientes quiebras bancarias, que han aumentado la preocupación sobre los riesgos del sistema financiero global.
Los responsables financieros y gobernadores de bancos centrales se reunían durante tres días antes de la cumbre de líderes programada este mes en Hiroshima.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el miércoles que había tenido una reunión “productiva” el martes con líderes del congreso para intentar subir el límite de deuda del país. Se reunirían el de nuevo viernes para intentar eliminar el riesgo a partir del 1 junio de una suspensión de pagos gubernamental sin precedentes si los legisladores del dividido Congreso no llegan a un acuerdo para subir el techo de deuda.
FR