Líderes de todo el mundo se reunirán mañana en las playas de Normandía para conmemorar el 75 aniversario del desembarco aliado en Francia. Será un sentido tributo a la alianza que combatió a los nazis y al sacrificio de sus soldados, y un llamado a la unidad que pasa por encima de las escaramuzas políticas.
Y es justo por eso que a muchos les preocupa lo que pueda hacer Donald Trump. El presidente estadunidense se ha mostrado repetidamente dispuesto a inyectar una retórica nacionalista y pronunciamientos partidistas en eventos que destinados a fomentar la unidad. Para él, no hay medias tintas en la política, ni puede dejar a un lado sus banderas partidistas al hablar de los militares o de asuntos de seguridad nacional.
El mandatario se burló del senador John McCain, un prisionero de guerra, por haber sido capturado por el enemigo vietnamita. La antipatía por el finado senador es tal que se corrió el rumor la semana pasada de que la Casa Blanca pidió a la Armada que mantuviera su nave USS McCain fuera de la vista de Trump durante su reciente viaje a Japón.
Es un patrón que estará bajo la lupa estos días, en que Trump viajará a Francia para participar en ceremonias a las que también concurrirá la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, una demócrata que él describió como “la loca de Nancy”.
“Es lamentable que tengamos que preocuparnos de que esta conmemoración histórica sea politizada”, dice Paul Rieckhoff, fundador de la organización Veteranos de EU de Afganistán. “Este es el presidente con el que tenemos que ir. Debemos contener la respiración”.
Más de 9 mil estadunidenses fallecieron durante el desembarco del Día D, un episodio que cambió el rumbo de la Segunda Guerra Mundial, poniendo en marcha el avance aliado que expulsó a los nazis de Francia y del resto de los países ocupados.
Como candidato a la presidencia, tuvo una disputa con los padres del capitán Humayun Khan, muerto en Irak, y tuvo un encontronazo con la madre del sargento La David Johnson, quien falleció en Níger. Trump recibió una prórroga cuando fue llamado a pelear en Vietnam debido a un espolón óseo. Pero no recordaba en qué pie tuvo el espolón, lo que hizo que muchos lo acusasen de haber evadido el servicio militar.
“Es alguien que piensa que está bien dejar que otro ocupe tu lugar en la guerra y que está dispuesto a fingir que tiene un problema para conseguirlo”, expresó el aspirante demócrata a la presidencia Pete Buttigieg, quien sirvió con la Armada en Afganistán. “Eso es una afrenta al honor de este país”.