La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, anunció que su país expulsó a la embajadora de México, María Teresa Mercado, así como a la encargada de Negocios y al cónsul de España, en respuesta a un supuesto intento por sacar del país a varios allegados del ex presidente Evo Morales.
El suceso fue interpretado por Bolivia como una intención de sacar a los ex ministros Juan Ramón Quintana, Wilma Alanoca y Javier Zavaleta, quienes junto a otros ex funcionarios aguardan un salvoconducto que les permita asilarse en México.
En la sede diplomática mexicana, situada en un exclusivo barrio al sur de la ciudad de La Paz, se encuentran de nueve a diez ex colaboradores de Morales, desde que éste dimitiera el pasado 10 de noviembre, tras casi 14 años en el poder, luego de una convulsión social contra las elecciones generales del 20 de octubre, declaradas fraudulentas por los observadores internacionales de la OEA.
"El gobierno constitucional que presido ha decidido declarar personas 'no gratas' a la embajadora de México en Bolivia, María Teresa Mercado, a la encargada de Negocios de España en Bolivia, Cristina Borreguero, al cónsul, Álvaro Fernández y al grupo de presuntamente diplomáticos encapuchados y armados solicitándoles que abandonen el país en un plazo de 72 horas", dijo Áñez.
"Este grupo de representantes de los gobiernos de México y España ha lesionado gravemente la soberanía del pueblo y del gobierno constitucional de Bolivia", aseguró la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, en una comparecencia en Palacio de Gobierno de la Paz.
La presidenta acusó el viernes a la Embajada de España en La Paz de cometer "conducta hostil" a su soberanía por el incidente en el que al parecer funcionarios de esa delegación diplomática iban en vehículos oficiales "encapuchados" y "presumiblemente armados".
Áñez aseguró que Bolivia "no es colonia de nadie " y pidió respeto al proceso que derivó en la recuperación de la democracia "después de 14 años de dictadura, se respeta", en referencia al tiempo en que Evo Morales se mantuvo en el gobierno.
"El gobierno Constitucional de Bolivia se respeta, la dignidad y el coraje de los bolivianos se respeta y se le valora", enfatizó la mandataria, asegurando que "tienen la más alta estima" por los gobiernos de España y México.
Las relaciones entre Bolivia y México están deterioradas desde que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador decidió darle asilo al ex presidente Evo Morales y sus allegados.
jamj