El reparto de mascarillas dejó ayer una jornada caótica y una tormenta de quejas y protestas por parte de cuerpos de Policía Municipal, agrupaciones de Protección Civil, ayuntamientos y de la Comunidad de Madrid. El viernes el Ejecutivo central anunció la distribución del material de protección en el transporte público, pero en Madrid hasta ayer por la tarde no se informó de cómo sería la entrega ni de quien debía realizarla entre las 06.00 y las 09.00 horas de hoy lunes y mañana martes.
En una primera orden enviada a las 17.00 horas a la Comunidad de Madrid, tras una cumbre en la Delegación de Gobierno de Madrid –dirigida por el socialista José Manuel Franco–, se indicaba que Policía Nacional se encargaría de repartir mascarillas en 16 estaciones estratégicas de la red de Metro de Madrid y que de las restantes se ocuparían la Policía Municipal y las 98 agrupaciones de Protección Civil de la región que cuentan con 2.500 voluntarios. Es decir, que la Policía Municipal tenía que preparar de forma precipitada un dispositivo para la distribución de 649.000 mascarillas en las otras 186 estaciones del suburbano en la capital. En total, en toda la región de Madrid había que distribuir 1.416.000 mascarillas.
Fuentes del Ayuntamiento de Madrid respondieron que sería necesario movilizar al menos a medio millar de agentes para dicha operación de reparto urgente y que casi no había tiempo para diseñarla.
Así que a las 20.00 horas, a apenas 10 horas de la apertura del Metro, la Delegación de Gobierno daba una nueva instrucción a la Policía Municipal de Madrid en la que se le indicaba que ya sólo tenían que dar apoyo y vigilancia a la Policía Nacional en 16 estaciones estratégicas de Metro: Príncipe Pío, Sol, Moncloa, Plaza Castilla, Avenida de América, Méndez Álvaro, Atocha, Chamartín, Villaverde Alto, Plaza Elíptica, Aluche, Cuatro Caminos, Nuevos Ministerios, Acacias, Legazpi y Oporto. También se les obligaba a repartir las mascarillas en 31 cabeceras de la EMT.
Así, la nueva orden de Delegación, además, contradecía a lo comunicado en un primer momento por carta a la Comunidad de Madrid. Con todo, en la Delegación de Gobierno aseguraron que estará garantizado el reparto de las mascarillas en otros intercambiadores de transporte y en las principales estaciones de Cercanías de Renfe en la Comunidad de Madrid.
Fuentes de la Delegación señalaron que se desconocía quiénes eran los encargados del reparto de la mascarillas en las estaciones de Renfe, aunque garantizaron su distribución en los puntos más importantes de transporte. Reiteraron que los ayuntamientos deberían coordinar el reparto conjuntamente con Policía Nacional, Local y Guardia Civil.
En medio de este cambio de instrucciones sobre la marcha, la recogida de las mascarillas que debían empezar a entregarse a las 6.00 horas de hoy, almacenadas en un polígono de Alcalá de Henares, no comenzó hasta las 20.00 horas de ayer. La Comunidad de Madrid criticó al Gobierno central por «improvisar» el dispositivo y reclamó la movilización del Ejército para que se distribuyeran hoy entre las personas que deben volver al trabajo. El Gobierno regional lamentó que a pocas horas de la vuelta al trabajo de miles de madrileños, no tenían «instrucciones claras» del Ejecutivo central para el reparto.
Además, denunció que la Delegación sugería que fueran «las policías locales, los voluntarios de Protección Civil y el personal de seguridad de Metro quienes asumiesen la tarea». Por eso, el equipo de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, recordó al delegado que todos ellos, además de los bomberos, «están volcados en el reparto de material de protección en las residencias y que asumir mañana el reparto de mascarillas en los medios de transporte iba a poner en peligro el suministro de material en estos centros».
La Delegación de Gobierno de Madrid contestó al Ejecutivo de Ayuso esgrimiendo que se trata de una situación excepcional. «Aquí no ha habido improvisación. Se han tenido que tomar decisiones en muy corto espacio de tiempo y se ha intentado hacer de la mejor forma y en coordinación con los Ayuntamientos», señaló un portavoz de la Delegación de Gobierno.
«Han tenido todo el fin de semana para prepararlo y nos avisan a última hora y nos corresponde a la Policía Municipal el reparto», señaló con enojo un mando de un cuerpo de la Policía Municipal de la zona oeste de la región.
En la mayoría de los pequeños pueblos de la región el reparto de las mascarillas era un quebradero de cabeza por la falta de agentes y la escasez de voluntarios de Protección Civil. «Nosotros solo tenemos ocho policías locales que se dedicarán a evitar que haya posibles saqueos en el reparto y pondremos a los concejales a repartir las mascarillas», señalaba el concejal de seguridad de un pueblo de la sierra de Madrid.
La cifra
100
Policías locales. Darán apoyo a la Policía Nacional en el reparto de mascarillas en Madrid capital.