El presidente francés, Emmanuel Macron, iniciará el próximo sábado su segundo mandato de cinco años, tras su reelección el pasado 24 de abril, con una ceremonia de investidura que se celebrará en el Palacio del Elíseo.
La presidencia francesa presentó este martes en una nota de prensa el desarrollo de esta ceremonia, que tendrá lugar a partir de las 10:00 horas locales y cuyo punto fuerte será el discurso del jefe del Estado. Antes de eso habrán llegado las altas autoridades invitadas al acto, entre las que están en particular los miembros del Consejo Constitucional, parlamentarios y responsables del Poder Judicial.
El presidente del Consejo Constitucional, el ex primer ministro Laurent Fabius, será el encargado de proclamar los resultados de la segunda vuelta de las presidenciales del 24 de abril, en la que Macron consiguió el 58.5 por ciento de los votos, netamente por encima del 41,5 % de la candidata ultraderechista Marine Le Pen.
A continuación el presidente será investido como Gran Maestro de la Orden Nacional de la Legión de Honor y pronunciará un discurso de carácter institucional en el que se espera que dé algunas pistas de sus intenciones para los próximos cinco años.
La segunda parte de la ceremonia se desarrollará en los jardines del Elíseo, donde Macron será recibido con salvas de cañón. El jefe del Estado rendirá honores a la bandera francesa, la Guardia Republicana tocará "La Marsellesa", el himno nacional, y finalmente pasará en revista a las tropas.
Una vez iniciado su nuevo mandato, Macron debería nombrar a un primer ministro que sustituya al actual, Jean Castex, encargado de dirigir un nuevo gobierno cuyo principal reto será afrontar las elecciones legislativas que están convocadas a dos vueltas el 12 y el 19 de junio. Unos comicios que son cruciales porque la continuidad del Ejecutivo depende de que Macron consiga una mayoría en la Asamblea Nacional que apoye su acción.
Si esa mayoría fuera de otro color ideológico —algo bastante improbable y que no ha ocurrido desde que las legislativas se celebran inmediatamente después de las presidenciales—, se vería obligado a ceder el gobierno y comenzaría lo que se conoce como una cohabitación.
Entre el 16 y el 20 de mayo tienen que formalizarse las candidaturas para las legislativas. Con esa perspectiva se están llevando a cabo negociaciones tanto dentro de la mayoría presidencial como entre los diferentes grupos de la oposición.
La izquierda en Francia avanza en un frente unido para legislativas
El Partido Comunista Francés (PCF) alcanzó un acuerdo con el partido de izquierda radical La Francia Insumisa, al igual que los ecologistas el domingo por la noche para sumarse al frente unido con el que los principales partidos de izquierda en Francia buscan arrebatar la mayoría parlamentaria a Macron. Las negociaciones entre LFI y el Partido Socialista (PS) continúan por su parte.
"Acuerdo entre La Francia Insumisa y el PCF para las próximas elecciones legislativas", anunció la última formación en su cuenta Twitter, después que su consejo nacional aprobara el pacto por 120 votos a favor, 25 en contra y 13 abstenciones.
En la estela del casi 22 por ciento de votos logrados por el izquierdista Jean-Luc Mélenchon (LFI), que se quedó en abril a las puertas del balotaje de la elección presidencial, los partidos de izquierda buscan ahora unirse para las legislativas del 12 y 19 de junio.
El objetivo es impedir una mayoría en el Parlamento favorable a Macron, reelegido el 24 de abril frente a su rival ultraderechista Marine Le Pen, e impedir así reformas como el retraso de la edad de jubilación de 62 a 65 años, impopular entre votantes de izquierda.
Gran parte de franceses, según dos sondeos publicados justo después de su reelección, quiere que el mandatario centrista pierda la mayoría parlamentaria, que goza desde 2017 en la cámara baja, lo que abriría la puerta a la "cohabitación".
Francia ya conoció este modelo en el pasado. En 1997, Jacques Chirac nombró como primer ministro al socialista Lionel Jospin. El presidente conservador había sido previamente el primer ministro entre 1986 y 1988 de su predecesor socialista, François Mitterrand.
Jospin llegó al puesto de primer ministro precisamente tras la alianza de partidos en una "izquierda plural", liderada por el socialista y en la que participaron entonces los ecologistas, los comunistas y el Partido Radical de Izquierda (PRG).
La actual "Nueva Unión Popular", de completarse, estaría liderada por Mélenchon, máxime cuando el resto de formaciones obtuvo menos de un 5 por ciento de votos en la pasada presidencial. El último escollo es el PS, con el que continúan las discusiones.
El negociador de LFI, Manuel Bompard, indicó este martes que los últimos diferendos son sobre puntos del programa, pero "esencialmente" sobre el reparto de las circunscripciones, una cuestión clave cuando el sistema electoral francés es uninominal a dos vueltas.
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