¿Te imaginas ir por la carretera y que encuentres a un extraño que tiene un perrito? Pues a un ciudadano de China le paso esto sin embargo, él mismo aceptó al cachorro sin hacer ninguna pregunta.
Pero eso no es todo, ya que todo resultó ser una gran sorpresa después de que unas semanas más tarde, toda la familia descubriera que, en realidad, había adoptado a un animal silvestre.
El animal en cuestión resultó ser un oso negro asiático y enima de todo, es una de las especies que se encuentra en peligro de extinción por lo que ahora ya está en un refugio.
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Familia adopta a un oso en lugar de un perro
Esta familia realizó un gran acto al adoptar a, lo que parecía, un perrito de la calle, sin embargo, todo cambió después de que dio algunas extrañas señales de no serlo.
Su Yun, un ciudadano de China, había llevado a un perrito de la raza mastín tibetano, una de las que más pelaje tiene además de ser de los más grandes del mundo y que puede alcanzar al menos los 80 kilos de peso.
Lo recibieron en su casa y le alimentaron, sin embargo, dos años después se dieron cuenta de que el perro no hacía los mismo ruidos que los de su especie.
De acuerdo con el propietario, su mascota comía siempre lo mismo y no se alimentaba de croquetas, como comúnmente lo haría un perro, ya que solo pedía fideos y una caja de frutas.
Ante esto, decidieron llevarlo a un veterinario para que les diera una de las noticias más impactantes de su vida.
En la veterinaria se les informó que habían criado a un oso negro asiático que ya pesaba más de 125 kilos, por lo que tuvieron que trasladarlo a Centro de Rescate de Vida Silvestre en Yunnan.
Hasta el momento, el pequeño ‘Blackie’ es visitado en dicho santuario ya que su bilis tiene propiedades medicinales que puede tener en el cuerpo humano.