Una ballena, un rorcual común de 19 metros y de unas 15 de toneladas, encalló en el puerto de Calais, en el norte de Francia, después de haberse lesionado; un fenómeno raro en el litoral.
"Se trata de una hembra de unos treinta años que encalló el sábado, estaba enferma, volvió al puerto de Calais todavía viva, se acercó demasiado a las rocas y encalló", relató Jacky Karpouzopoulos, presidente de la Coordinación Mastozoológica del Norte de Francia (CMNF, por sus siglas en francés).
Jacky Karpouzopoulos comentó que fue una escena "violenta" la suscitada tras el hallazgo de la ballena.
El lunes por la tarde, "vamos a arrastrarla para ponerla en una zona donde haremos, el martes por la mañana, una autopsia", dijo Jacky Karpouzopoulos.
De acuerdo con él, la ballena será descuartizada para ser incinerada.
ir