Hamás e Israel acuerdan alto al fuego en Gaza

El acuerdo alcanzado fue mediado por Egipto y un enviado especial de la ONU; la tensión entre ambas regiones es la más grave desde 2014 con la operación militar israelí " Margen protector ".

Jóvenes israelíes observan el sistema de protección "Cúpula de Hierro" que detecta y destruye misiles provenientes del lado palestino/AFP
Jóvenes palestinos observan un edificio destruido por las fuerzas israelíes en la Ciudad de Gaza/AFP
Franja de Gaza /

Los movimientos islamistas Hamás y Yihad Islámica anunciaron un acuerdo para detener la escalada de tensión de las últimas horas, que ha dejado dos muertos palestinos en los bombardeos de represalia israelíes contra objetivos militares en Gaza, donde las milicias han disparado cerca de doscientos cohetes.

El portavoz de Hamás que gobierna en Gaza, Fawzi Barhoum, alabó en su página de Facebook "el éxito de los esfuerzos egipcios para volver a la calma y detener esta escalada", como secundó Dawood Shihab, portavoz de la Yihad islámica, la segunda facción más importante del enclave costero.

"Las mediaciones e intervenciones de las partes regionales e internacionales han concluido en el alcance de un acuerdo que termina la actual escalada entre las facciones militares en Gaza y el Ejército de la ocupación israelí", recogió el sitio web de noticias Safa, con sede en la Franja.

Los medios locales señalaron que en las últimas horas Egipto y el enviado especial para el proceso de paz de la ONU, Nicolai Mladinov, han trabajado para poner fin a las hostilidades, la más grave desde la operación militar israelí "Margen protector" de 2014.

El diario Haaretz asegura que Israel ha aceptado el alto el fuego, aunque cita a un oficial de seguridad en condición de anonimato que matiza: "sólo los hechos sobre el terreno determinarán cómo seguimos respondiendo".

Anoche comenzó una escalada en el contexto de la tensión que se vive en la zona fronteriza desde marzo, donde se convocan protestas palestinas cada viernes, en las que han muerto 139 palestinos, la mayoría en manifestaciones en incidentes violentos, y en las que ayer un soldado israelí resultó herido moderado por el impacto de un artefacto explosivo en el pecho.

En este tiempo, las milicias palestinas han lanzado cerca de 200 cohetes y morteros, según dijo el Ejército, que desde las tres de la tarde hora local contabilizó 20 interceptados por el sistema defensivo Cúpula de Hierro y 73 que hicieron impacto en zonas abiertas del sur de Israel.

El Ejército anunció que iba a "tomar represalias" contra Hamás para frenar "los diferente tipos de terrorismo que han causado daños significativos a comunidades israelíes", en los últimos meses, forma de ataques contra la valla de separación, el lanzamiento de artefactos incendiarios y explosivos contra Israel, y el disparo de cohetes, de los que responsabilizó a los islamistas.

Durante la campaña, Israel llevó a cabo decenas de bombardeos sobre infraestructuras militares islamistas en el enclave, incluidos dos túneles, un edificio usado como centro de entrenamiento bajo el que discurría otro túnel, la sede del batallón de Hamás en Beit Lahia (norte de Gaza) "y docenas de otros objetivos terroristas en complejos militares".

Dos palestinos de 15 y 16 años murieron en los bombardeos, que hirieron a otras 25 personas, según el Ministerio de Sanidad palestino.

En Israel, tres personas fueron trasladadas al hospital con heridas de leves a moderadas causadas por un proyectil que impactó en una casa en Sderot, una ciudad israelí próxima al norte del enclave, informaron los servicios de emergencia Maguen David Adom (equivalentes a la Cruz Roja española).

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, había anunciado esta noche que aumentaría "la intensidad de los ataques" si fuera necesario y el diario Times of Israel le citó diciendo que se mantendría la campaña de represalia hasta que Hamás entendiera "el mensaje". 

  • Agencia EFE
  • Agencia de noticias con 84 años de trayectoria

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