Un incendio de grandes proporciones en Pinares de Mayari, mayor macizo montañoso de Cuba, cumplió hoy una semana de iniciado y se mantiene sin control tras devorar más de mil 300 hectáreas de bosques.
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"El viento y la zona que es muy agreste no nos ayuda a controlarlo, y además son varios los focos de este incendio, el mayor que recuerde en este lugar", dijo el teniente coronel Gustavo Álvarez.
Agregó que ayer fue "uno de los días más complejos por la variabilidad de los vientos", lo cual limitó el uso de la aviación que se emplea en apoyo a los trabajos en tierra. En las labores de extinción participan unos mil efectivos de los servicios de Guardabosques y Bomberos, así como de las fuerzas armadas, vecinos e instituciones estatales.
Los 800 habitantes del lugar fueron evacuados a sitios seguros y aunque hasta el momento no se cuenta con un balance general de pérdidas, estas son cuantiosas en el aspecto forestal.
"El incendio acabó con pinares de 20 y hasta 30 años de edad, sin contar otros estragos", afirmó Álvarez Wilder Carmenate, director del Centro de Investigaciones Ambientales, comentó que el siniestro "dejará cuantiosos daños a la ecología".
El área de La Sabina, que lleva el nombre de una especie de pino nativo de mucho valor biológico, está totalmente afectada y hay daños de consideración en la loma La Mesura, donde habitan especies de la flora atendidas con esmero para evitar su extinción.
Intensa sequía añade complejidad a la crisis que vive Cuba
La mayor isla del Caribe padece una intensa sequía desde hace meses, la cual provocó incluso dos de los cuatro apagones registrados en la mayor parte del país en los últimos 10 días, desde el centro hasta el oriente.
El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) confirmó hoy que "más de 280 mil consumidores de agua se encuentran en régimen de servicio restringido ".
En ese contexto, las cuencas que abastecen a La Habana, la capital del país con más de dos millones de habitantes, "reportan los valores más bajos de los últimos 30 años con tendencia a decrecer", puntualizó el INRH.
La sequía se suma a la crisis multiforme que vive Cuba desde 2019, sin que se vislumbre salida a corto plazo.