Al menos 63 mil hectáreas han sido consumidas por incendios forestales en Chile, informó la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), luego que se decretó el estado de excepción en la región de O'Higgins.
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Detalló que se han registrado 79 incendios, de los cuales 27 siguen activos en pastizales; otras 30 permanecen pero están controlados, y 22 ya fueron extinguidos. Expertos atribuyen la alta cantidad de siniestros a una incesante ola de calor en este verano austral, ante la cual la Dirección Meteorológica mantiene alertas este fin de semana en las zonas afectadas por el fuego.
Una de las regiones más afectadas es O'Higgins, unos 79 kilómetros al sur de Santiago, donde 45 mil hectáreas de pino adulto, eucalipto, arbolado y matorral fueron arrasados por el que ha sido catalogado como el incendio más grande en la zona en los últimos 50 años. Onemi reportó que en O'Higgins, 36 personas fueron afectadas, 16 de ellas enviadas a albergues, y que el fuego destruyó nueve viviendas, tres bodegas y tres vehículos.
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, decretó el estado de excepción constitucional, estado de catástrofe y zona de catástrofe para toda la región de O'Higgins, lo que permite liberar recursos de emergencia.
El director de Onemi, Ricardo Toro, informó este sábado que solicitarán ayuda internacional para combatir los que definió como los “peores incendios forestales que no conocía en su historia”. Agregó que para ello se realizan coordinaciones con la cancillería para pedir apoyo a los gobiernos de México, Estados Unidos, Argentina, Canadá, Brasil, Uruguay y Perú.
FM