Los docentes iraníes realizaron protestas el martes ante las sospechosas intoxicaciones que sufrieron cientos de niñas, mientras que las fuerzas de seguridad dispersaron varias manifestaciones mediante cañones hidrantes y gases lacrimógenos, dijeron activistas.
En tanto, los fiscales empezaron a presentar acusaciones criminales contra periodistas, activistas y otras personas debido a sus declaraciones sobre los incidentes no aclarados, que comenzaron en noviembre y escalaron en días recientes en los que decenas de escuelas presentaron denuncias.
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Irán ha enfrentado protestas desde septiembre, cuando la joven Mahsa Amini murió a manos de la policía de la moral. Estos han sido los retos más graves a la teocracia iraní desde la Revolución Islámica de 1979. Los nuevos incidentes amenazan con provocar nuevamente la furia de la gente, en particular de los padres que temen por la seguridad de sus hijas. Aún resta por determinar quién está detrás de los presuntos ataques y si y cuáles sustancias químicas se utilizaron.
Al menos unas 127 escuelas han denunciado sospechas de envenenamiento, según cifras recopiladas por el diario reformista Etemad, de Teherán. En un día reciente se denunciaron decenas de casos. Casi todas las escuelas que han denunciado incidentes son de niñas.
Activistas e informes de prensa han dicho que un millar de estudiantes se han enfermado, y 400 de ellas han sido hospitalizadas. Las autoridades iraníes no han divulgado cifras exactas.
Mohammed Hassan Asefari, un influyente parlamentario que es miembro de un panel investigador y tiene lazos estrechos con las fuerzas de seguridad, dijo a la agencia noticiosa semioficial ISNA que unas 5 mil estudiantes se quejaron de trastornos en 230 escuelas en 25 de las 31 provincias del país. Ningún otro informe oficial o de prensa ha reportado cifras tan altas hasta ahora.
El martes, aparecieron videos y fotos online que supuestamente mostraban a los docentes manifestando en Ahvaz, Isfahán, Karaj, Mashhad, Rasht, Sanandaj, Saqqez, Shiraz y otras ciudades.
Otros mostraron a la policía antimotines en las calles. Activistas que se identificaron como miembros del Consejo Coordinador de Sindicatos Docentes dijeron que la policía utilizó gas pimienta, cañones hidrantes y la fuerza para dispersar a los manifestantes en Mashhad, Rasht y Saqqez.