El ex vicepresidente ecuatoriano Jorge Glas está en huelga de hambre en la prisión de Guayaquil a la que fue trasladado tras ser capturado en un asalto policial a la embajada de México en Quito , informó este miércoles su amigo y ex mandatario Rafael Correa.
Correa añadió que "hemos confirmado que la emergencia médica (del lunes) fue un intento de suicidio" de Glas y responsabilizó al presidente Daniel Noboa, quien ordenó la irrupción policial en la embajada, de la "integridad física y emocional de Jorge".
"No ha comido nada y se encuentra en huelga de hambre", dijo por la red social X el ex gobernante socialista, un día después de que Glas fuera regresado desde un hospital a la cárcel de máxima seguridad La Roca de Guayaquil.
El ex vicepresidente, a quien México concedió asilo, había sido hospitalizado el lunes a causa de una descompensación por negarse a comer en la cárcel, según un reporte oficial.
Correa señaló este miércoles que "por fin", desde que fue detenido,
"sus hijos y sus abogados pudieron conectarse con Jorge Glas vía Zoom".
Sonia Vera, parte de su equipo de abogados, confirmó que Glas "está en huelga de hambre", en un mensaje en las redes sociales.
El ex vicepresidente está en el centro de una crisis diplomática tras su detención sin autorización el viernes dentro de la embajada de México en Quito, incidente que derivó en la ruptura de relaciones.
Vera divulgó un video en el que el exfuncionario vía telemática manifestó que durante la detención fue "apaleado". "Yo trataba de pararme, pero no podía por la paliza que me habían dado", expresó.
Glas, de 54 años, apuntó que fue "torturado, guindado de los pulgares" como en una "dictadura". "Yo no voy a claudicar", sentenció.
aag