Bella Johnston, una joven australiana reveló que a los 14 años perdió unos 25 kilos en cuestión de meses y que, además de este cambio peligroso y notorio en su cuerpo, experimentó otros síntomas inquietantes: fatiga, mareos, una tos persistente y cortante que le causaba perder el aliento y desmayarse.
Sus padres la llevaron a ver a un médico, quien rápidamente afirmó que padecía anorexia nerviosa, un trastorno alimentario, aunque al final los médicos se habían confundido de diagnóstico pues Bella tenía cáncer.
"Tan pronto como lo escribí, nadie me creyó en nada... Nunca me ofrecieron una exploración, una tomografía computarizada, una resonancia magnética ni nada", le dijo a Mamamia la Sra. Johnston, una influencer que ahora tiene 27 años .
Su enfermedad sólo se intensificó. Bella continuó perdiendo peso y desarrolló un bulto pronunciado en el cuello que los médicos descartaron como fiebre glandular. Cuando tenía 18 años, estaba tan frustrada por el sistema de salud le estaba fallando que se mudó a Melbourne.
Tras el primer diagnóstico tuvieron que pasar otros cinco años de empeoramiento de los síntomas y visitas a varios médicos antes de que a Johnston finalmente le diagnosticaran paraganglioma, un cáncer que afecta la red neuroendocrina, una serie de nervios y células glandulares que controlan las hormonas del cuerpo.
El paraganglioma puede desarrollarse en varias partes del cuerpo, pero los tumores generalmente se forman alrededor de los vasos principales. Johnston señaló que fue por casualidad que recibió el diagnóstico.
"Un día me quemé bastante y fui al médico y él me miró y me dijo: "¿Qué te pasa?". Parecía la muerte', dijo al Daily Mail.
Pesaba menos de 45 kilos y su presión arterial era tan baja que apenas podía mantenerse en pie. Los médicos la operaron, le abrieron el cuello casi de oreja a oreja y dijeron que "tenía dentro como una fruta podrida".
"De 2009 a 2014 aproximadamente, yo era una niña en Australia que moría de cáncer, pero todos los médicos me decían que era un trastorno alimentario", dijo en un TikTok de noviembre.
En otro TikTok publicado en febrero, Johnston detalló todos sus diagnósticos erróneos. Su pérdida de peso fue diagnosticada como anorexia, sus vómitos como bulimia y el tumor que presionaba su tráquea era asma. También le dijeron que todos sus síntomas estaban en su cabeza.
JCM