Un juez de Ohio sentenció a cadena perpetua a una mujer que dejó morir a su bebé de 16 meses para irse de vacaciones el año pasado, luego de que ella reconociera su culpa.
Kristel Candelario, una ecuatoriana de 31 años, abandonó a su hija Jailyn por al menos 10 días mientras viajaba por Detroit, Puerto Rico y Michigan.
"Así como no dejaste salir a Jailyn de su encierro hasta que murió, así también deberías pasar el resto de tu vida en una celda sin libertad. La única diferencia será que la prisión al menos te alimentará y te dará líquidos que la negaste a ella", dijo el juez Brendan Sheehan al emitir su sentencia.
La bebé murió de hambre y deshidratación severa, según la autopsia. Su cadáver fue hallado envuelto en cobijas y cubierto de materia fecal.
La mujer enfrentó cargos por homicidio imprudencial (de ahí la cadena perpetua) pero también por poner en peligro a una menor de edad, delito por el que se le imputaron ocho años de prisión.
A la audiencia acudieron los abuelos de la víctima, quienes pidieron "no satanizar" a la madre en vista de que "todos han pecado ante Dios", según el reporte de El Universo.
Pruebas presentadas en la audiencia:
Por su parte, la acusada reconoció estar arrepentida de sus acciones y llena de tristeza por la muerte de su hija. Recordemos que en junio del 2023 ella dejó sola a la menor, y vecinos refirieron que no era la primera vez que lo hacía.
"Todos los días le pido perdón a Dios y a mi hija Jailyn. Soy una persona creyente de Dios y reconozco hoy que todos y todas en muchas ocasiones somos tentados por el enemigo. Dios y mi hija me han perdonado, quisiera pedir perdón también a mi hija Amaia y a mis padres", alegó la imputada, citada por TC Televisión.
Así lo dijo:
La defensa de Kristel argumentó que su clienta sufría problemas mentales y que nadie sabía el dolor que sentía, pero sus solicitudes fueron desechadas.
SNGZ