Este domingo, Croacia no solo se despidió del año, sino de su moneda nacional 'la kuna', esto tras adoptar el euro como nueva divisa.
Con ello, el país balcánico abandonó su moneda y pasó a ser el 20º miembro de la eurozona, además de integrarse en este espacio que permite a más de 400 millones de europeos circular sin pasaporte.
Está acción será un hito para una nación de 4 millones de habitantes que desde hace mucho tiempo lucha por una integración más estrecha con el resto de la Unión Europea.
Con información de economistas, el cambio de la kuna (moneda de Croacia) producirá beneficios porque más de la mitad de su comercio exterior, dos tercios de la inversión extranjera directa y aproximadamente 70% de sus turistas dependen de la zona de la moneda única.
HCM