El Volcán de Fuego, cuya violenta explosión del pasado 3 de junio ha dejado ya más de 114 muertos, aumentó hoy su actividad explosiva con ceniza que llega a los 5 kilómetros de altura.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) alertó que las explosiones están cargadas de mucha ceniza que puede caer en las comunidades de San Miguel Dueñas, Ciudad Vieja y La Antigua Guatemala.
Agregó que la ceniza se desplaza hasta una distancia de 25 kilómetros al noroeste y norte del edificio volcánico.
El ente científico precisó que los retumbos del volcán son sensibles a una distancia de 10 kilómetros de su perímetro y que las ondas de choque hacen vibrar los techos de algunas viviendas.
Debido al incremento de esta actividad, no se descarta que en las próximas horas se generen flujos piroclásticos y se debe estar atento al descenso de lahares, dijo.
El Insivumeh recomienda a la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) vigilar la evolución de la actividad en el Volcán de Fuego, situado a 50 kilómetros al oeste de la capital guatemalteca, sobre todo al descenso de lahares por la tarde y noche.
Mientras, pobladores y autoridades ingresaron hoy a la comunidad de San Miguel Los Lotes, denominada como "zona cero" por el impacto de la erupción, para evaluar si es posible continuar con las labores de búsqueda y rescate de cadáveres.
Las torrenciales lluvias de las últimas horas y el descenso de lahares la noche del lunes han complicado la situación en las zonas devastadas por la erupción, que además de los fallecidos deja 197 desaparecidos y 1.7 millones de afectados.
Los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez, que fueron los más afectados, continúan bajo una alerta roja y en estado de calamidad pública desde el pasado 3 de junio.
gcc