Las inundaciones producto de fuertes lluvias en el estado brasileño de Bahia (noreste) causaron dos nuevas muertes que elevaron el total a 20, mientras la crisis continuaba agravándose el lunes con casi 63 mil desplazados en 100 municipios en emergencia, informaron las autoridades.
"Estamos viviendo el mayor desastre ocurrido en la historia de Bahia", declaró este lunes el gobernador de Bahia, Rui Costa, que supervisa en las áreas afectadas el operativo conjunto, en marcha desde el sábado con el gobierno federal y otros estados.
Las escenas dramáticas de viviendas bajo el agua y calles convertidas en ríos se repetían en municipios ubicados en el sur del estado, golpeados desde el jueves por intensas precipitaciones que provocaron rupturas de presas y desbordes de ríos el fin de semana.
En Itapetinga, Idalicio Dos Santos avanzaba por el agua entre las copas de los árboles en un pequeño bote. "Hoy ya hice este recorrido, como mínimo, unas veinte veces, llevando y trayendo personas", contó.
Imágenes aéreas en ese municipio muestran a tres hombres remando acostados boca abajo en una colchoneta por una calle, rodeados de casas con el agua hasta las ventanas.
En el vecino Itambé, Tiola Almeida, habitante del lugar, ayudaba a su madre a rescatar las pocas pertenencias que le quedaron. "En algunas casas, (el agua) llegó hasta 1.80 metros de altura. En la casa de mi madre llegó aproximadamente a 1.40" metros, dijo, parado delante de una montaña de escombros.
La esperanza muere al último
Las últimas cifras de desplazados en el estado casi duplicaron el balance del domingo: 62 mil 796 personas debieron dejar sus hogares y más de la mitad necesitaron refugio, según la Superintendencia de Protección y Defensa Civil de Bahia (Sudec).
Además de la veintena de muertos desde inicios de noviembre a causa de las lluvias, se registraron hasta ahora 358 heridos.
Se estima además que un total de 471 mil 009 personas han sido afectadas por el mayor caudal de lluvias producido por el fenómeno climático denominado "La Niña", sumado a las últimas precipitaciones excepcionales en un tiempo corto, según especialistas.
Igualmente, el número de municipios afectados subió a 116 de 417 en el estado, con al menos 100 en situación apremiante, cerca del doble que en la víspera, informó la Sudec.
La ciudad de Itabuna, donde se registraron las dos últimas muertes, sufrió el desborde del río Cachoeira. Uno de los fallecidos, un joven de 21 años, fue arrastrado por la corriente; la otra fue una mujer de 33, que falleció a causa de un derrumbe, según el último informe del gobierno estatal el lunes por la tarde.
"El agua está comenzando a bajar en la cabecera del río Cachoeira, entonces, aunque lentamente, la expectativa es de mejora en los próximos días", señaló el gobernador Costa, en un intento por llevar esperanza.
Costa anunció ayudas sociales para las familias afectadas, sin dar detalles, y créditos especiales sin intereses para comerciantes.
El gobierno federal, en tanto, dispuso 20 millones de reales (unos 3.6 millones de dólares / 745.62 pesos mexicanos) para los damnificados, informó el ministro de Ciudadanía, Joao Roma.
La luz al final del tunel
Estael Sias, meteoróloga de MetSul, evaluó que "hay una correlación" entre la intensidad de las lluvias en el noreste del país y el fenómeno de "La Niña", que provoca precipitaciones por encima de lo normal.
El agravante es que el temporal de los últimos días se juntó con las lluvias que azotaron la región semanas atrás.
"Había un escenario favorable al desastre", estima Sias. "Ya había llovido mucho en noviembre y ahora vuelve a llover en un área que todavía no se recuperó de aquel exceso de precipitaciones", explicó.
En las últimas horas, en algunos municipios cayó el volumen de agua equivalente a todo un mes.
Por ejemplo, Salvador, capital de Bahia, quintuplicaba hasta el viernes la media histórica de 58 milímetros para diciembre, según Defensa Civil de la ciudad.
RM