El gobierno colombiano anunció este miércoles que entregará más de 680 mil hectáreas de tierra a campesinos, afros e indígenas, en medio del conflicto por las ocupaciones a la fuerza de extensos predios.
"Son 681 mil hectáreas que se formalizan y entregan desde el día de hoy", dijo en rueda de prensa Gerardo Vega, director de la Agencia Nacional de Tierras (ANT). La superficie equivale a cuatro veces el tamaño de Sao Paulo. Más de 12 mil familias serán beneficiadas en 19 de los 32 departamentos.
El jefe de la ANT, la entidad estatal a cargo de distribuir la tierra, especificó que el grueso de las hectáreas (297 mil) irán destinadas a ampliar los resguardos indígenas. El primer gobierno de izquierda de Colombia asumió el poder el 7 de agosto con la promesa de llevar a cabo una "reforma agraria" ante la alta concentración de la propiedad rural.
El acceso a la tierra está en el centro del conflicto armado que estalló a mediados del siglo XX. Históricamente las guerrillas han reivindicado la propiedad para los campesinos, mientras los paramilitares despojaron de sus fincas a miles de familias a sangre y fuego.
La promesa del presidente Gustavo Petro motivó a los "sin tierra" a ocupar a la fuerza predios. En la misma conferencia ante los medios, la ministra de Agricultura, Cecilia López, pidió "paciencia" a los reclamantes que ya han chocado con hacendados.
"El mensaje claro es: empezamos a cumplir lo prometido, no le quiten espacio a este proceso ocupando o invadiendo tierras", enfatizó López.
Vega pretende que durante los cuatro años de esta administración se entreguen unas 10 millones de hectáreas a las comunidades necesitadas, como quedó acordado en el acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC de 2016.
El gobierno echará mano de los predios arrebatados al narcotráfico para cumplir con ese propósito. Según datos oficiales, 39.6 de las 114 millones de hectáreas de Colombia son cultivables, aunque en la actualidad solo el 12 por ciento (5.3 millones) están siendo aprovechadas.
dr