La crisis diplomática entre Bolivia y Cuba, disparada luego de que La Paz suspendiera sus relaciones con La Habana el viernes, se elevó en las últimas horas con la afirmación cubana de que el “gobierno de facto de ese país” actúa en sintonía con la política de Estados Unidos en América Latina.
“Desde el mismo inicio del golpe, funcionarios del gobierno norteamericano aplicaron presiones en Bolivia para imponer el deterioro de las relaciones con Cuba, perseguir a los medico cubanos, acosar a los diplomáticos y abortar la cooperación médica en beneficio del pueblo boliviano”, dijo la noche del sábado la cancillería local en un pronunciamiento de más de mil 500 palabras.
“Cuba rechaza las infundadas declaraciones del gobierno de facto”, agregó la cancillería después de que el ministro de la presidencia boliviano, Yerko Núñez, informara que la ruptura “obedece a las recientes e inadmisibles expresiones del canciller cubano y la permanente hostilidad y constantes desagravios de Cuba contra el gobierno y su proceso democrático".
La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, acusó el miércoles pasado a La Habana de quedarse con 80 por ciento de los pagos por los servicios médicos que los cubanos prestaron a su país durante el mandato de Evo Morales, lo que el canciller cubano, Bruno Rodríguez, calificó de “vulgares mentiras” y “servilismo a EU”.
En ese contexto y por primera vez en una década, el gobierno cubano dijo que “desde 2006 hasta 2012, Cuba asumió todos los gastos de la cooperación con Bolivia por valor de más de 200 millones de dólares anuales, lo que incluyó equipamiento médico, medicamentos, insumos y material gastable, sostenibilidad de la brigada cubana, transportación aérea de los colaboradores y gastos de los equipos médicos”.
“No acostumbramos a divulgar lo que nos cuesta la cooperación médica con otros países”, dijo la cancillería local y puntualizó que desde 2012 “el dinero devengado por la brigada médica cubana en Bolivia no se transfirió nunca a Cuba y se utilizaba para cubrir los gastos de la colaboración en ese país”.
La suspensión de relaciones entre Bolivia y Cuba sigue a la ruptura con Venezuela; a sostenidos encontronazos con México, cuyo gobierno dio asilo a algunos de los funcionarios del depuesto gobierno; y con Argentina, desde donde Morales dirige la campaña de su Movimiento al Socialismo con vista a las próximas elecciones.
Colombia y Brasil también mantienen un duro enfrentamiento retórico con Cuba, pero hasta el momento no han suspendido relaciones diplomáticas. Tras el triunfo de la revolución cubana en 1959, EU logró que la mayoría de los países de América Latina rompieran relaciones con. la isla hasta que en el decenio de los años 70 del siglo pasado Cuba comenzó a recomponer sus vínculos con la región. Con Bolivia lo hizo en 1980.
jamj