Cristina Kirchner pide acuerdo para encarar crisis sobre cotización del dólar en Argentina

La ex mandataria aseguró que Argentina es el único país con una economía bimonetaria: con peso argentino para las transacciones cotidianas y el dólar como moneda de ahorro y para determinadas transferencias.

Cristina Kirchner, actual vicepresidenta de Argentina (AFP / Argentina)
Editorial Milenio
Buenos Aires /

La ex presidenta de Argentina y actual vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, expresó este que el "problema de la economía bimonetaria" es el "más grave" que tiene el país, y consideró que "es de imposible solución" sin un acuerdo entre los sectores políticos, económicos, mediáticos y sociales.

En una larga carta publicada en su web oficial, la ex mandataria se refirió a la crisis económica que sufre el país y a otros polémicos asuntos, como las acusaciones de la oposición respecto a quién ejerce de verdad el poder, si ella o Alberto Fernández. "En la Argentina el que decide es el Presidente. Puede gustarte o no lo que decida, pero el que decide es él", recalca en el texto.

¿Por qué a los argentinos les importa el dólar?

En los últimos años, los argentinos han mantenido una enorme desconfianza a su moneda, priorizando casi todos sus ahorros con dólares y fuera del sistema bancario. Esta situación que se agravó tras la crisis económica de 2001 originada por la "ley de convertibilidad", donde un peso argentino valía lo mismo que un dólar.


A comparación de los mexicanos, que el precio del dólar es tema de preocupación para algunas transacciones como la deuda externa y la compra de artículos en el extranjero, en Argentina es de crucial interés debido a la devaluación constante de su moneda y el disparo en la inflación para ahorros y transacciones inmobiliarias. Los departamentos de Puerto Madero, el barrio más caro de Buenos Aires, sólo se cotizan en "verdes".

Esta misiva, con el título "27 de octubre. A diez años sin él y a uno del triunfo electoral: sentimientos y certezas", se difunde en la víspera del primer aniversario de su victoria junto a Fernández, día en que además se conmemorarán los 10 años desde que falleció su esposo, el también ex presidente Néstor Kirchner.

Los argentinos tiene sus ahorros cotizados en dólares debido a la devaluación de su moneda (Shutterstock)

Argentina y su "obsesión" con los dólares

En la parte económica de la misiva, Cristina Fernández defiende su gestión como presidenta y critica duramente la del que fue su sucesor, el conservador Mauricio Macri.

"Terminó su gobierno con una deuda impagable, con el FMI instalado otra vez en nuestro país, con una desocupación rondando los dos dígitos, con salarios y jubilaciones por el piso, con tarifas dolarizadas e impagables y con una inflación muy superior al 50 por ciento".

La viuda de Kirchner, que atribuye la crisis actual al "derrumbe macrista" más los efectos que deja la pandemia del coronavirus, se centra especialmente en el problema de la convivencia del peso argentino y el dólar, que históricamente ha provocado grandes desequilibrios en la economía por la poca confianza en la divisa nacional y su consecuente devaluación.

Cinco tipos de cotización para el dólar

A comparación de México, que se tienen dos cotizaciones frente al dólar: el de ventanilla y el interbancario, en Argentina existen cinco tipos de cotización del dólar: el oficial, el turista, el solidario, con liquidación y el "blue", siendo este último el del mercado negro, pero el que refleja la cotización más próxima del peso argentino.


Mientras que el cambio oficial está dictado por el Banco Central, el dólar "blue" es que que supera su cotización más del doble. Hasta este 26 de octubre, mientras el peso argentino cerró en $83.50 ARS, el del mercado negro llegó a estar en $195 ARS por dólar.

"Argentina es el único país con una economía bimonetaria: se utiliza el peso argentino que el país emite para las transacciones cotidianas y el dólar estadounidense que el país -obviamente- no emite como moneda de ahorro y para determinadas transacciones como las que tienen lugar en el mercado inmobiliario", señala, convencida de que la economía no puede funcionar con normalidad de esa manera.

Esa situación, añade, es un "problema estructural de la economía argentina" y "todos los gobiernos" se han topado con él, y remarca también que no se trata de una cuestión de clases, ya que los dólares los compran "tanto trabajadores para ahorrar" como empresarios para pagar las importaciones, para ahorrar y también "para fugar formando activos financieros en el exterior".

Un problema, el más grave que tiene Argentina según ella, que tiene "imposible solución sin un acuerdo que abarque al conjunto de los sectores políticos, económicos, mediáticos y sociales" del país.

"Hoy (...) pese a no tener obligaciones de pago en moneda extranjera en lo inmediato gracias a la reestructuración de deuda llevada a cabo por el gobierno, con superávit comercial y mayor nivel de reservas en el BCRA (Banco Central) que cuando terminó mi gestión, continuamos con la restricción externa de esa moneda -o faltan dólares o hay demasiada demanda- a la que se suma una más que evidente extorsión devaluatoria", reconoce.

La popularidad de Alberto Fernández ha ido bajando conforme a los meses. (AFP / Archivo)

​​Una desconfianza en el gobierno de Alberto Fernández

El pronunciamiento de la ex mandataria se produce en el momento de mayor debilidad del presidente Fernández desde que asumió en diciembre de 2019. Si bien llegó a tener una popularidad mayor al 60 por ciento al principio de la pandemia de coronavirus, en los últimos meses cayó a la mitad a medida que el deterioro económico se profundizó.

Alberto Fernández, un "peón" de CFK

Según una encuesta de la consultora Director de Giacobbe & Asociados, cerca del 57 por ciento de los consultados cree que Fernández de Kirchner es quien toma las decisiones contra 34.6 por ciento que opina es Alberto Fernández. El sondeo se realizó entre 13 y 15 de octubre en todo el país sobre 2.500 casos y un margen de error de 2 puntos porcentuales.
​La ex presidenta admitió que “el freno a la economía y la incertidumbre generalizada sobre que va a pasar con nuestra vida son agobiantes. No esta explicado en ningún libro ni hay teoría que lo resuelva. No hay soluciones. Es permanente ensayo y error. O mejor dicho: brote, contagio y volver otra vez para atrás”.

El presidente Fernández ha dicho que no está en sus planes devaluar porque ello no hará más que aumentar la pobreza del 40.9 por ciento. Sin embargo, analistas económicos advierten que no es sostenible una brecha de más del 100 por ciento entre la cotización oficial y la marginal del dólar.

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