Un deslave que el lunes pasado golpeó a la capital ecuatoriana ha dejado a la fecha 28 muertos y 52 heridos, uno de ellos de gravedad, informó el domingo el alcalde de Quito, Santiago Guarderas, en base a los últimos reportes.
Los organismos de rescate todavía buscan a una mujer de 38 años que está desaparecida y vivía en el popular barrio de La Comuna, afectado por el deslizamiento de tierra.
El "total de número de personas fallecidas es 28, personas heridas 52 mil 7 hospitalizados, 44 que han sido dados de alta y uno sigue estando en estado crítico", señaló Guarderas en una rueda de prensa.
Hasta el martes se habían reportado 24 fallecidos, 48 heridos y 12 desaparecidos. El lunes, una lluvia torrencial que se extendió por 17 horas, con un récord de 75 litros de agua por m2, desprendió una ladera y formó el aluvión que a su pasó arrastró personas y también destruyó viviendas, vehículos y postes eléctricos.
Lodo, piedras, escombros y autos se desplazaron a lo largo de 3 kilómetros de la avenida La Gasca, donde hasta este domingo continuaban las tareas de limpieza. Un embalse en la montaña que almacena el agua de lluvia, con capacidad para 4 mil 500 metros cúbicos, colapsó al recibir un caudal casi cuatro veces mayor, de acuerdo con Guarderas.
El alcalde quiteño agregó que 555 personas, que representan 160 familias, resultaron afectadas por el aluvión que arrasó con un centro deportivo en el que un grupo de personas disputaba un campeonato de vóley.
Frente al desastre el viernes el municipio de Quito declaró en estado de emergencia al sector, lo que permitirá el uso de recursos nacionales para atender a los damnificados.
RM