A dos días de la erupción, el Volcán de Fuego mantiene en alerta a las autoridades.
Cerca de las dos de la tarde, el escurrimiento de material volcánico por la parte sur del coloso provocó que se suspendieran las labores de rescate y la evacuación en al menos seis comunidades del municipio aledaño, Escuintla, cuando el balance de víctimas es ya de 73 muertos, 192 desaparecidos y miles de evacuados.
“Ya tenemos un dato con nombres y las localidades donde hay personas desaparecidas, y tenemos el número, que son 192”, dijo en rueda de prensa el titular de la Coordinadora para la Reducción de Desastres (Conred), Sergio Cabañas.
David de León, vocero del organismo, explicó que, según el análisis de expertos, nuevamente podrían registrarse flujos piroclásticos, los cuales están compuestos por ceniza, lodo, agua, palos y rocas que descienden desde la cima del coloso, de 3,763 metros de altura, 35 kilómetros al suroeste de la capital, Ciudad de Guatemala.
Desde muy temprano iniciaron ayer los trabajos en las comunidades El Rodeo y San Miguel los Lotes. Cientos de policías, militares y bomberos caminaban sobre las cenizas todavía calientes para encontrar aunque sea un rastro de vida. Al menos hasta antes de la evacuación, sólo se salvaron animales.
La erupción del pasado domingo dejó 46 personas heridas, 3 mil 271 evacuadas, 2 mil 625 albergadas y 1.7 millones de afectados, según la Conred.