Rebeldes del ELN dejaron en libertad a los tres tripulantes de un helicóptero que el grupo guerrillero derribó el 11 de enero en una zona fronteriza con Venezuela, según informó la Defensoría del Pueblo.
Maxwell Joya, Carlos Quiceno y Julio Diaz habían sido secuestrados por el grupo armados tras el ataque a la aeronave.
Los tres ocupantes del helicóptero de una empresa de valores fueron entregados a una comisión de la Defensoría (ombudsman) y de la Iglesia católica en la región cocalera de Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander.
Los liberados están en "aparente buen estado de salud", indicó el organismo de derechos humanos en un comunicado, sin ofrecer más detalles.
Última guerrilla reconocida en Colombia, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) se atribuyó el secuestro el 16 de enero.
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Según medios locales, el helicóptero trasportaba mil 700 millones de pesos (unos 540 mil dólares) para el pago de los trabajadores de la empresa Aerocharter Andina en Catatumbo.
Las autoridades además señalan a la guerrilla de haber incinerado el aparato después de haberlo atacado desde tierra.
El ELN es blanco de una fuerte persecución militar tras el atentado con coche bomba contra una academia policial el 17 de enero, que dejó 21 jóvenes muertos, además del agresor.
El ataque fue perpetrado por un miembro de esa organización alzada en armas, según admitieron los rebeldes.
En respuesta, Duque rompió el agonizante proceso de paz que había iniciado su antecesor en 2017 y ahora presiona a Cuba para que le entregue a los negociadores rebeldes que esperaban en La Habana la reactivación de las conversaciones.
Con unos mil 800 combatientes y una extensa red de apoyo, el ELN opera en una docena de los 32 departamentos colombianos.
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