La ex presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, se encuentra actualmente en prisión acusada de intento de golpe de Estado al entonces gobierno de Evo Morales. Ella llegó a la presidencia de Bolivia el 11 de noviembre después de que Morales y su equipo de trabajo renunciaran a sus cargos públicos.
Tras un año en el poder, Jeanine Áñez dejó la presidencia bajo el riesgo de ser acusada de sedición, terrorismo y conspiración siendo sentenciada a 4 meses de prisión preventiva después de que la Fiscalía de Bolivia determinara su caso como “riesgo de fuga.”
El 13 de marzo se cumplió, exactamente un año de que Jeanine Áñez fuera arrestada, la ex presidenta comentó en su cuenta de Twitter que se siente arrepentida por los errores que cometió durante su gobierno, sin embargo, mantuvo su postura sobre que es una “presa política.”
“Cumplo un año de encierro. Agradezco a Dios por mantenerme con vida. La verdadera Justicia es suya, mientras secuestradores y violadores dictan desde Palacio mi encierro y la violación de mis Derechos Humanos y de los presos políticos.”
El inicio de una fallida huelga de hambre
Una de las más grandes disputas que ha vivido Jeanine Áñez durante su estadía en prisión, son los aplazamientos de tiempo que mes con mes se le han impuesto. Los supuestos cuatro meses de prisión preventiva que iba a durar la resolución de su conflicto se han convertido en 12 meses de dolor, sufrimiento y agonía tanto para la familia de Áñez como para ella misma.
Por ello, la ex mandataria,, previo a su más reciente juicio, se declaró en huelga de hambre desde su celda a un día de iniciar las resoluciones por su libertad.
Jeanine exigía “un proceso justo” a un juez del Tribunal Supremo de Justicia al mismo tiempo que extendía su huelga de hambre. Con el paso del tiempo publicaba en sus redes sociales; “Estoy en mi quinto día de huelga, pero me siento fuerte, mi espíritu y mi conciencia son libres, eso nadie me lo podrá quitar”
Sin embargo, su fuerza de voluntad y su salud física empezó a empeorar con el paso de los días, tanto su abogada como un médico hablaron del estado de salud en el que se encontraba la ex presidenta.
“La señora está completamente mal, está temblando. No puede ni siquiera pararse: si lo hace se desmaya”, dijo Norka Cuéllar, abogada de Jeanine. Por otro lado, un médico señaló que su estado de salud era “delicado” pero que “ella definirá si continúa con su huelga de hambre”; dijeron ambos personajes después de que la ex mandataria se desmayara en plena audiencia.
Áñez acusa tortura psicológica y violación de Derechos Humanos
Tras su huelga de hambre, Jeanine Áñez empezó a denunciar varios actos de tortura psicológica por parte del personal del penal. Áñez narró cómo dejaban abierta su celda con la intención de que pudiera oler los alimentos que se preparan en la cocina de la cárcel.
Las consecuencias de no comer se vieron reflejadas en la salud mental de la ex mandataria, provocándole una serie de crisis nerviosas que llamaron la atención de altos funcionarios del penitenciario, quienes intentaron hacerle una serie de evaluaciones a las cuales se resistió.
Ante esta situación un juez impuso que se le implementara un “tratamiento de rehidratación” sin la autorización de Áñez. Esto causó tanto enojo de los ciudadanos de Bolivia, que rápidamente la noticia llegó a un Comisionado de las Naciones Unidad para los derechos humanos, quien advirtió que “todo tratamiento médico o alimentario forzado podrían equivaler a tortura o malos tratos.”
Al final, Jeanine Áñez "accedió" a colocarse una solución por vía venosa de rehidratación para mejorar su estado de salud.
La forma en la que fue detenida la ex presidenta de Bolivia y los tratos que ha recibido en prisión ha hecho que varios personajes de la política del país se manifiesten a favor de los Derechos Humanos de Jeanine.
Una de ellas es la presidenta del partido político Fuerza Popular, Keiko Fujimori, quien calificó como una “violación a los derechos humanos” la forma en la que se detuvo a Áñez. Por su parte complementa su comentario afirmando que esta acción atenta contra la democracia del país.
Problemas de salud de Jeanine Añez
Las precarias condiciones en las que vive Jeanine, así como el estrés y las decisiones que la ex presidenta ha tomado durante su tiempo en la cárcel han repercutido directamente en su salud. La ex mandataria se descompensó en plena audiencia por mantener una huelga de hambre que duró más de 15 días.
Por otra parte, ha dicho que se encuentra con temor por algunas acciones que atentan contra su salud física y psicológica. Debido a esta razón Jeanine afirma que ha pasado más de un mes sin salir al patio del penal a que le dé el sol.
También ha dicho que padece de anorexia nerviosa y que constantemente es hostigada dentro del penal por un grupo de mujeres que la humillan y le hacen colocarse carteles denigrantes de su persona. Por si fuera poco, la ex presidenta también cree que los medicamentos que le están administrando, le provocan tener sueño todo el día y alucinaciones.
Familia de Jeanine muestra preocupación
Ante la terrible situación que vive la ex presidenta de Bolivia dentro del reclusorios, los más preocupados son su familia quienes a unos meses de ser detenida, hicieron una vigilia frente al penal donde se encuentra detenida Jeanine.
La convocatoria fue encabezada por sus hijos para solicitar que trasladen a su madre a una clínica especializada, ya que estaban preocupados por la salud de su mamá.
Carolina Ribera Áñez, hija de Jeanine, considera que el motivo por el cual su madre está en prisión es que representa un “trofeo” para el gobierno de Evo Morales. De igual forma su hija ha mostrado preocupación por el estado físico en el que se encuentra la ex mandataria de Bolivia.
“Ha bajado mucho de peso y está tan delicada y deteriorada que ni siquiera tiene fuerzas para caminar”- dijo en una entrevista en Washington
La preocupación de la familia Áñez ha ido en aumento a la par, en que la ex presidenta les comunicó sus deseos de morir. “Ya no quiero vivir” dijo Jeanine esperando dejar de ser una carga a sus hijos, a quienes les desea que puedan reanudar su vida.
Ante esta situación la hija de Jeanine afirmó que su madre intentó suicidarse el 21 de agosto del año pasado. Lo que más angustia le causa a su hija es el hecho de que su madre sigue en el mismo ambiente que la orilló a quitarse la vida y mientras eso no cambie en cualquier momento puede auto agredirse nuevamente.
Un intento de suicidio en su celda
Lo más lamentable de la situación que vive la ex mandataria de Bolivia, es el hecho de que el año pasado intentó suicidarse provocándose así misma una lesión y varios rasguños en uno de sus brazos, afirmó el ministro de gobierno, Eduardo Castillo.
Pese a no tener ningún tipo de complicación la noticia conmocionó al país entero, entre ellos a su abogada quien comentó que esto era un “llamado de auxilio” por parte de la ex presidenta.
Varios funcionarios públicos lamentaron la situación: “Informo al pueblo boliviano que la señora Jeanine Áñez pretendió generarse una autolesión durante la madrugada” dijo Edgar Castillo antes de asegurar que la ex mandataria se encontraba estable.
Esta situación provocó que una corte permitiera el acceso de un familiar durante las noches al penal para cuidar de la vida de Áñez, hasta que lograra recuperarse emocionalmente.
RM