El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró este martes que hasta el 2019, la pobreza general en el país se ubicó en el 17 por ciento y la extrema en el 4 por ciento, un dato que contrasta con el de diversas organizaciones que cifran los indicadores por encima del 80 por ciento.
"La pobreza general en un 17 por ciento y la pobreza extrema en un 4 por ciento, si de necesidades de vivienda, salud, educación, y demás se trata", dijo Maduro durante la presentación de su mensaje anual, donde también aclaró que los indicadores del 2020 todavía no se encuentran disponibles.
El jefe de estado señaló que la pobreza en Venezuela es heredada de otros gobiernos e "inducida" por las sanciones que Estados Unidos ha impuesto contra su administración.
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Los datos ofrecidos por Maduro contrastan con los de la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi), realizada por las universidades más importantes del país, y que situó el indicador para ese año en 96 por ciento la pobreza en general y el 79.3 la extrema.
Asimismo, la organización HumVenezuela, que reúne a más de una decena de ONG locales, sostiene que el nivel de pobreza extrema en Venezuela es de 80 por ciento.
Por otra parte, el mandatario informó que en el 2020 el desempleo fue de 8.8 por ciento, dos puntos por encima en comparación al 2019. Agregó también que ha habido "una reducción del trabajo formal del 59.3 por ciento a 56.1 por ciento, y del trabajo informal del 40.7 al 43.9 por ciento". Sin embargo, miles de personas han emigrado del país.
Según dijo, estas son "heridas" que "obligan" al gobierno a multiplicar las formas de protección a las familias a través de bonificaciones ya que, como reconoció, el salario mínimo que perciben los venezolanos no se corresponde con la realidad económica. Según la tasa de cambio del Banco Central de Venezuela (BCV), el salario mínimo mensual es de menos de un dólar.
"Una de las principales heridas es el salario de los trabajadores, que en nada se ajusta a la realidad económica. Esto responde a varios factores, pero fundamentalmente al daño que le han hecho las más de 400 medidas coercitivas (sanciones extranjeras) y la asfixia criminal que desde 2015 han impulsado contra nuestra país", defendió.
Por ello, insistió, el gobierno entregó, en el último año, 517 millones de bonos que beneficiaron a 14.2 millones de personas "y se transfirieron recursos a los sectores más vulnerables por el orden de mil 400 millones de dólares".
Venezuela atraviesa una severa crisis económica de la que el Gobierno culpa a Estados Unidos por las sanciones que ha impuesto desde 2015, pero los problemas en materia de salud y servicios públicos se registran desde hace, al menos, una década.
dmr