El candidato izquierdista Pedro Castillo aumentó este martes su ventaja en el escrutinio del balotaje presidencial del domingo en Perú sobre su rival derechista Keiko Fujimori, según el cómputo oficial.
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Castillo tenía 50.25 por ciento de los votos sobre 49.75 por ciento de su adversaria, tras escrutarse hacia las 22:51 horas el 97.82 por ciento de las mesas de sufragio contabilizadas, pero la contienda sigue abierta, según fuentes del órgano electoral (ONPE), la diferencia es de sólo 0.50 por ciento.
La ventaja del maestro de escuela rural es ahora de más de 96 mil votos sobre Fujimori, mientras que nueve horas antes era de 70 mil, según la ONPE.
"Ahora las impugnaciones (de actas en las casillas) pasan a ser cruciales" para decidir la elección, dijo la politóloga peruana Jessica Smith.
La hija del encarcelado ex presidente Alberto Fujimori denunció el lunes "irregularidades" e "indicios de fraude", luego de que su rival pasara a encabezar el escrutinio. En línea con su líder, unos 200 manifestantes fujimoristas se congregaron la tarde del martes a protestar contra el "fraude" afuera de la sede de la ONPE en Lima.
"Queremos justicia, que se respete el voto de los ciudadanos peruanos", dijo Ileana Chávez, quien alzaba una pancarta que decía "no al comunismo disfrazado".
La ONPE niega la posibilidad de fraudes, así como también la presidenta de la Asociación Civil Transparencia, Adriana Urrutia, que indicó al diario El Comercio: "No hay ninguna evidencia que nos permita hablar de fraude electoral".
Mientras se alarga el suspenso, Castillo pidió en Twitter "estar atentos para defender la democracia que se expresa en cada uno de los votos, dentro y fuera de nuestro amado Perú".
Zonas rurales, la clave en la victoria de Pedro Castillo
La esperanza de Fujimori está en los votos del exterior, donde estaban habilitados para sufragar un millón de los 25 millones de electores peruanos, y que demoran en ser contabilizados. El partido Perú Libre de Castillo pidió en un comunicado a la ONPE que "cuide la correcta protección de los datos de los votos, al procesarlos y publicarlos".
En el exterior, Keiko consigue por ahora el 66.19 por ciento de los sufragios frente al 33.8 por ciento de su rival, con el 56.8 por ciento de estas mesas escrutadas, una diferencia de 61 mil votos sobre Castillo.
Sin embargo, todavía falta que se cuenten también casi el 2 por ciento de las mesas de sufragio de Perú, la mayoría de zonas rurales y selváticas, donde Castillo cosecha más votos que su rival. A nivel nacional, el domingo votó el 75 por ciento de los electores registrados, más que el 70 por ciento de la primera vuelta, en abril.
El balotaje parece lejos de ponerle fin a las convulsiones políticas del último quinquenio, que condujeron a Perú a tener cuatro presidentes desde 2018, tres de ellos en cinco días de noviembre de 2020.
Conteo con vigilias; reportan errores en los conteos de actas
La misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) enfatizó, antes de la denuncia de Fujimori, que el escrutinio se realizó "de acuerdo a los procedimientos oficiales" y respaldó el trabajo de la ONPE. En redes sociales han denunciado presuntos errores en el conteo de las actas.
"Si Keiko gana, cómo va a justificar su triunfo si ha denunciado fraude", cuestionó el analista Hugo Otero, ex asesor del difunto ex presidente Alan García. "Estamos pasando por un momento de incertidumbre y expectativas, pero lo que espera el país es que se confirme que los resultados de la votación son aceptados por los candidatos", apuntó Otero.
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Fujimori, de 46 años, casada y con dos hijas, podría convertirse en la primera presidenta de Perú, meta para la que ha trabajado 15 años desde que asumió la tarea de reconstruir desde las cenizas el movimiento político de derechista populista fundado por su padre en 1990.
Pero perder ante Castillo no solo le significaría su tercera derrota en un balotaje. Tendrá que ir a juicio con riesgo de terminar en la cárcel, porque la fiscalía la investiga por el caso de los aportes ilegales de Odebrecht; escándalo que salpicó además a cuatro expresidentes peruanos. Ya estuvo 16 meses en prisión preventiva por esta causa.
De su lado, el maestro de Cajamarca de 51 años, que salió del anonimato hace cuatro años al liderar una huelga del magisterio, sería, de vencer, el primer mandatario peruano sin lazos con las élites política, económica y cultural. La posible victoria de Castillo ya provocó una depreciación del sol peruano.
El nuevo presidente asumirá el poder el 28 de julio en un país que registra la mayor tasa de mortalidad del mundo por la pandemia, con más de 186 mil muertos entre 33 millones de habitantes.
dmr