La filial venezolana del fabricante chino de neumáticos Pirelli paralizó el lunes sus operaciones tras presentar problemas por falta de materia prima, anunciaron sus trabajadores.
La planta de Pirelli, que es una de las tres marcas que operan en el país, amaneció el lunes con las puertas cerradas, dijo Luis Álvarez, secretario general del sindicato de la empresa. Varias decenas de trabajadores se concentran en la entrada de la planta, en el estado central de Carabobo, para protestar por la medida y exigir la apertura de la instalación.
En la empresa laboran unas 860 personas.
Álvarez señaló que desde finales de la semana pasada "se agotó la materia prima", lo que llevó a la paralización de las operaciones.
En al menos tres oportunidades durante este año Pirelli suspendió las actividades de forma temporal por falta de materia prima, pero esta es la primera vez que la paralización se da un acuerdo con el sindicato, precisó Álvarez.
La empresa hasta el momento no ha habido comentarios sobre la situación de la planta.
Álvarez dijo que representantes del gobierno iniciaron contactos con los directivos de la empresa para lograr la reapertura de la planta que hasta mediados de año alcanzó una producción de unas 51 mil 943 unidades, que representa cerca del 7 por ciento de su capacidad.
Numerosas empresas han paralizado operaciones o limitado la producción debido a las dificultades para importar materia prima, situación que ha profundizado los problemas de escasez, hiperinflación, y la recesión económica que enfrenta el país suramericano desde hace cuatro años.
El presidente Nicolás Maduro activó este plan para recuperar la economía que implicó una reconversión monetaria y un aumento del salario mínimo de 3 mil que ha sido cuestionado por empresarios y analistas que reciben el programa profundizar la hiperinflación y la contracción económica.
En medio de la aplicación del plan han sido detenidos varios gerentes, empleados y propietarios de comercios en todo el país señalados con precios especiales, lo que tiene mucho las tensiones en Venezuela.
Durante el mes pasado, los precios crecieron a un ritmo diario de 2.7 por ciento, lo que llevó a la inflación en julio a 125 por ciento y la tasa anualizada a 82.766 por ciento, según los cálculos de la Asamblea Nacional, controlada por la oposición. El Fondo Monetario Internacional estimó que la inflación en Venezuela podría cerrar este año en un millón por ciento.
La galopante escalada de precios ha golpeado especialmente a los mayoritarios sectores pobres, que representan 87 por ciento de la población, de acuerdo con un estudio realizado el año pasado por tres de las principales universidades del país.
La crisis económica y social ha desatado una migración masiva de venezolanos. De acuerdo con las Naciones Unidas, 2.3 millones de venezolanos han salido desde 2014 del país petrolero.
jamj