La Comunidad de Madrid confirmó el tercer fallecimiento con viruela del mono en España tras los registrados a finales de julio en Alicante y Córdoba. En esta ocasión, la enfermedad no ha sido la causa directa de la muerte, ya que se trataba de un hombre que padecía una infección concomitante con la viruela del mono. En los otros dos, ambos jóvenes, la muerte se produjo por meningoencefalitis vinculada a la viruela.
España sigue siendo el país con más infecciones por viruela del mono de Europa, 7 mil 037, según la última actualización de Sanidad, y contabiliza casi un tercio de los casos totales.
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Desde que a mediados de mayo salto la alerta, la Comunidad de Madrid registra hasta el momento un total de 2 mil 463 casos de viruela del mono, siete más que el último balance facilitado el pasado viernes, mientras que la cifra de vacunados es de 6 mil 546 personas, únicamente doce más que el pasado viernes.
Sin embargo, la Consejería de Sanidad suspendió la petición de nuevas citas para recibir la vacuna contra la viruela del mono ante la ausencia de viales para su administración.
Asimismo, en las últimas 24 horas se han descartado otros 17 casos de infección por el virus de la viruela del mono, por lo que el cómputo total desde que comenzó la alerta llega a mil 182.
En cualquier caso, lo más importante es que la tasa de letalidad asociada esta infección sigue siendo extraordinariamente baja y la mayoría de los enfermos no requieren de hospitalización.
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Por lo general, la enfermedad comienza con síntomas similares a los de la gripe, que incluyen fiebre, dolores de cabeza, dolores musculares y una grave falta de energía, acompañada de inflamación de los ganglios linfáticos.
Aunque los últimos estudios señalan un par de nuevos síntomas: Hinchazón del pene y dolor rectal.
El virus no tiene ninguna preferencia por sexo o edad. Toda la población es susceptible de infectarse, pero el brote en Occidente se está extendiendo entre los hombres que mantienen sexo con otros hombres. En España, el 95% de los casos de infectados son hombre de entre 30 y 50 años, según la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica.