Una mujer, de 56 años, identificada como Jennifer contó que un tumor que tenía en su abdomen, del tamaño de una sandia, impidió que pudiera tener relaciones sexuales con su pareja.
Ahora que pudo extirparlo, decidió terminar su relación debido a que en estos momentos se siente liberada y su nivel de confianza está mejor.
"Mi nivel de confianza está por las nubes. Me siento muy bien'.
Su caso fue dado a conocer a través de un episodio en Take My Tumor de TLC; ahí la joven reveló que su tumor no tuvo un diagnostico certero, sin embargo, conoció a la oncóloga quirúrgica Dra. Kimberly Dalal, quien pudo extirparle el tumor.
Cuando salió de cirugía, la joven se sorprendió porque se dio cuenta que el tumor la estaba afectando psicológicamente y no tenía la misma confianza que ahora.
Agregó que el tumor también afectó su estilo de vida porque no podía caminar o salir a la calle con su perro o novio, tampoco podía agacharse para levantar objetos.
Respecto a su intimidad, la joven aseveró que se sentía cohibida con su pareja por lo que en el paso de los años dejaron de mantener una vida sexual.
Una semana después de su cirugía, la mujer decidió terminar su relación. A través de Take My Tumor, expresó: "Antes, cuando tuve el tumor, tener intimidad no estaba demasiado en mi radar. No le di mucha importancia. Y ahora que no tengo el tumor, es muy liberador".
¿Cómo fue la extirpación de su tumor?
De acuerdo con Jennifer, su recuperación fue dolorosa. Pese a que la cirugía que le realizaron estuvo sin complicaciones. Sus venas y vasos sanguíneos sangraron más de lo que esperaba el cirujano.
Su doctor le explicó a la mujer que su tumor era un tipo de cáncer raro, el cual se presenta en menos del uno por ciento de todos los casos de Estados Unidos. Cuando le extirparon el tumor, su cáncer también quedó eliminado.
APC