Jerusalén quedó cubierta de blanco este jueves tras una tormenta invernal que cubrió de nieve buena parte de las zonas altas de la región.
El dorado de la emblemática Cúpula de la Roca asomaba bajo la nieve. Las principales autopistas a Jerusalén y sus principales avenidas quedaron cortadas, y escuelas y negocios cerraron durante la jornada mientras las topadoras municipales trabajaban para despejar las calles.
La policía israelí también cerró importantes autopistas en las montañas de Cisjordania por las condiciones peligrosas de la carretera.
Las nevadas son inusuales en las colinas en torno a Jerusalén, y ocurren quizá una vez por invierno.
Una tormenta invernal está golpeando el este del Mediterráneo con vendavales y viento en Oriente Medio. Estambul y Atenas quedaron cubiertas de nieve esta semana.
EHR