Con 189 votos a favor, dos en contra (de Estados Unidos e Israel) y cero abstenciones, la Asamblea General de la ONU rechazó el bloqueo estadunidense a Cuba, en una sesión en la que antes examinó ocho enmiendas propuestas por Washington.
En un ejercicio que se ha realizado durante 27 años, EU dilató el momento de la votación, previsto inicialmente para ayer, mediante la presentación de ocho enmiendas al proyecto cubano contra el bloqueo, que conllevaron su votación una a una.
Sin embargo, las ocho enmiendas fueron rechazadas al contar solo con los votos a favor de EU, Israel y Reino Unido. Una de las votaciones sumó además la aprobación de las Islas Marshall.
La votación de hoy estuvo antecedida por un fuerte enfrentamiento entre el canciller cubano, Bruno Rodríguez, y la delegación estadunidense, encabezada por Nikki Haley, quien hace semanas adelantó que en diciembre renunciará a su puesto en la ONU como representante permanente de la administración de Donald Trump.
“Su gobierno no tiene la menor autoridad moral para criticar a Cuba ni a nadie en materia de derechos humanos”, le dijo Rodríguez a Haley, quien defendió la necesidad de condicionar el tema del bloqueo a lo que definió como “violaciones sistemáticas” de esos derechos en la isla.
Las enmiendas estadunidenses estaban centradas en la defensa de las libertades en la isla y en el pedido de liberación de presos políticos, vinculándolas a la agenda 20-30 de la ONU, y Washington esperaba que “otros países se unan a nosotros en la condena de cosas en Cuba que la ONU condena de manera rutinaria en otras partes del mundo”, según sus diplomáticos.
El proyecto de resolución cubano dice que desde que el presidente estadunidense John F. Kennedy impuso el bloqueo, en febrero de 1962, éste ha provocado daños a la isla por más de 933 mil millones 678 mil de dólares.
La posición cubana ha sido aprobada cada año desde 1992 en la Asamblea General por mayoría. El año pasado, fue apoyada por 191 votos contra dos, los de EU e Israel, pero ese y los anteriores acuerdos no tienen carácter vinculante.
Durante el mandato del presidente Barack Obama, en 2016, por primera y única vez EU se abstuvo de votar contra la resolución cubana, como parte de un inédito acercamiento a la isla, que incluyó la reapertura de embajadas en ambas capitales en 2015.
AA