Trabajadores en París comenzaron a descontaminar algunas escuelas que dieron positivo a niveles inseguros de plomo después del incendio en la catedral de Notre Dame, como parte de los esfuerzos por proteger a los niños de riesgos por envenenamiento con el metal.
Las autoridades locales ordenaron el mes pasado una limpieza profunda cerca de la catedral, después del incendio del 15 de abril. Se espera que los trabajos se completen antes de que los niños regresen a clases en septiembre.
En la escuela primaria y guardería Saint Benoit, a unos cientos de metros de Notre Dame, trabajadores vestidos con equipo protector limpiaron el jardín de juegos.
Mickael Prestavoine, director de operaciones industriales en Seche Urgences Interventions, dijo que se resolvió "excavar el patio escolar" después que análisis descubrieron la presencia de plomo en el material de superficie.
La agencia de salud de la región parisina recomendó en junio realizar análisis de sangre a niños menores de siete años y mujeres embarazadas que viven cerca de Notre Dame porque son los más vulnerables a los problemas de salud causados por el plomo.
Días atrás, la agencia dijo que un niño requiere atención médica porque los análisis revelaron que corría riesgo de envenenamiento por plomo. Otros 16 estaban al borde de encontrarse "bajo riesgo" y se los vigilará por precaución, entre 162 niños examinados en París.
La limpieza de plomo en la catedral se reanudará la próxima semana con medidas de seguridad más estrictas, después de que las autoridades la suspendieron el mes pasado bajo presión de inspectores del trabajo preocupados por la salud de los trabajadores.
Los niveles de plomo siguen siendo excepcionalmente altos en algunos puntos dentro de la catedral, la plaza exterior y las calles adyacentes. Toda la zona está cerrada al público desde el 15 de abril.
Sin embargo, no se han registrado niveles peligrosos en otras calles vecinas donde siguen acudiendo turistas y residentes y las tiendas de souvenirs y los restaurantes han reabierto.
jos