El ex presidente de Perú, Pedro Castillo, afirma que aún es mandatario y rechazó renunciar al cargo pese a que en esa nación ya se designó a Dina Boluarte como sucesora, quien, insinuó, es "una usurpadora".
Castillo, quien hace unos días anunció la disolución del Congreso peruano y tras ello fue destituido por la misma sede legislativa, en una serie de situaciones que desataron una profunda crisis política, se pronunció por primera vez tras su detención.
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A través de su cuenta en Twitter, hizo un llamado al pueblo peruano afirmando que está "en el trance más difícil de mi gobierno humillado, incomunicado, maltratado y secuestrado, pero aún así revestido de la confianza y lucha de ustedes".
"Les hablo para reiterar que soy incondicionalmente fiel al mandato popular y constitucional que ostento cómo Presidente, y no renunciaré ni abandonaré mis altas y sagradas funciones", agregó.
Además, sin dar nombre directo de la nueva presidenta, el ex mandatario peruano dijo que "lo dicho recientemente por una usurpadora no es más que los mismos mocos y babas de la derecha golpista".
"Por lo que el pueblo no debe caer en su juego sucio de nuevas elecciones", sostuvo.
En Perú, la crisis política y social continúa, especialmente hoy, donde se reportó la toma del aeropuerto de Arequipa, la segunda ciudad más importante de esa nación, así como las protestas en varias carreteras.
Baluarte asumió el cargo el jueves, luego de que el Congreso la ratificó en ese puesto. Ella misma dijo que esperaba que se realizar una "tregua" política, mientras también se analizaba las próximas elecciones presidenciales.