Un grupo de partidos de izquierda en España, entre ellos Unidas Podemos, se unieron al nuevo partido Sumar, liderado por la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, para ir en coalición en las próximas elecciones generales de julio.
Sumar irá por separado del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), el partido del presidente Pedro Sánchez, y pretenden sobre todo arrancar votos al conservador Partido Popular (PP) y el ultraderechista Vox.
Sumar y Podemos, que en las elecciones del 28 de mayo obtuvo unos de sus peores resultados, concurrirán juntos después de que el partido morado, presidido por Ione Belarra, aceptara in extremis unirse a la coalición formada por Izquierda Unida, los comuns de la todavía alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, Compromís y Más Madrid, además de otras formaciones como Verdes Equo, la Chunta Aragonesista, Batzarre, AraMés, Iniciativa del Pueblo Andaluz y Drago Canarias.
Podemos aceptó firmar el pacto pese a que denunció un veto en las listas a la ministra da Igualdad, Irene Montero, pareja del ex líder de Podemos Pablo Iglesias.
"Se trata del acuerdo más amplio y plural alcanzado en toda la etapa democrática en España entre fuerzas progresistas y verdes. La pluralidad de Sumar es la pluralidad del país y queremos hacer de ello un signo de identidad de esta coalición electoral, que constituye la principal alternativa para que la ciudadanía progresista recupere la esperanza”, señaló Sumar en un comunicado.
Se le preguntó a la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, si prefería una alternativa fuerte a la izquierda del PSOE o un espacio fragmentado que hiciese confluir el voto hacia los socialistas.
Ribera afirmó que el PSOE aspira a gobernar en solitario, pero cree que es "bueno para los votantes de izquierda que haya una alternativa que resulte convincente y atractiva". "Hay espacio para las dos cosas", dijo, deseando "lo mejor" a los integrantes de Sumar y Podemos.
La suma de las candidaturas electorales ubicadas a la izquierda del PSOE ha conseguido alrededor de 2.2 millones de votos en las últimas elecciones locales frente a los casi 2.9 millones de noviembre 2019, según El País.
ROA