La Policía de Filadelfia (Pensilvania, Estados Unidos) cree que el tiroteo masivo que la noche del sábado dejó tres muertos y 11 heridosen un popular barrio de la ciudad se produjo a raíz de una discusión entre dos individuos que llevaban armas de fuego.
"Estos individuos empezaron a dispararse el uno al otro, y ambos sufrieron heridas, uno de ellos mortales", explicó la comisaria de la Policía de Filadelfia, Danielle Outlaw, durante una rueda de prensa este domingo.
Las autoridades explicaron que las tres personas fallecidas son dos hombres y una mujer afroamericanos, entre los 22 y los 34 años de edad.
También sufrieron heridas otras 11 personas, entre ellas cuatro menores de edad, según medios locales.
La comisaria Outlaw relató cómo un agente de policía que estaba presente en el lugar en el momento del tiroteo disparó contra uno de los atacantes, al que probablemente hirió.
El atacante dejó caer su arma y huyó, y todavía no ha sido identificado ni apresado.
Las autoridades ofrecen una recompensa de 20 mil dólares a quien ofrezca información que lleve a la captura del sospechoso.
"Estamos usando todos los recursos disponibles para determinar qué ha ocurrido, no solo anoche, sino lo que hay detrás de la violencia con armas de fuego en esta ciudad", defendió la comisaria.
El de Filadelfia es uno de los múltiples tiroteos masivos, aquellos en los que se ven afectadas cuatro o más personas, además del atacante, que han tenido lugar en las últimas 24 horas en Estados Unidos.
En Chattanooga (Tennessee) 3 personas murieron y 14 resultaron heridas en una balacera en un club nocturno y en Phoenix (Arizona), una adolescente murió y otras ocho personas resultaron heridas en un tiroteo en un centro comercial.
El debate sobre el control de las armas de fuego se avivó en el país después de la muerte el pasado 24 de mayo de 19 niños y dos profesoras en una escuela de primaria de Uvalde (Texas) por disparos de un joven de 18 años.
Está previsto que la próxima semana la Cámara de Representantes vote sobre un paquete de medidas de control de armas que contempla, entre otras cosas, la prohibición de los cargadores de más de diez balas.
De las dos armas de fuego requisadas tras el tiroteo de anoche en Filadelfia, una contaba con un cargador extendido.
La división entre demócratas y republicanos hace difícil que se aprueben medidas de control de armas en el Congreso, aunque existen expectativas después de que un grupo de senadores de ambos partidos mantuviera reuniones en las últimas semanas para tratar de acordar una legislación sobre el tema.
El propio presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha urgido a los legisladores a que "hagan algo" frente a lo que considera "una epidemia de violencia con armas".
RM