Cuatro candidatos a presidente de gobierno de España; Pablo Casado (PP), Pedro Sánchez (PSOE), Albert Rivera (Ciudadanos) y Pablo Iglesias (Podemos) sostuvieron el primer debate, de los dos consecutivos, en el que se lanzaron ataques y resaltaron sus promesas de campaña de cara a la elección general del domingo 28 de abril.
El actual mandatario, el socialista Pedro Sánchez, es el favorito en las encuestas para mantener su puesto, pero no para lograr la mayoría necesaria para formar un gobierno solo. El presidente español fue blanco de la mayoría de las críticas de los candidatos de oposición en el debate.
Todos contra Pedro Sánchez
En el debate, Albert Rivera abrió el primer minuto de intervención asegurando que Sánchez quiere indultar a los presos independentistas catalanes que están siendo juzgados por el Tribunal Supremo y "lleva en la frente la palabra indulto".
Pablo Casado también refutó en cara a Sánchez sus pactos con los independentistas catalanes y vascos, al tiempo que puesto en valor la labor económica que había llevado a cabo el gobierno de Mariano Rajoy que, además, "había llevado a los golpistas" al banquillo y que había aprobado la prisión permanente revisable.
"Quizá por eso el señor Joaquim Torra (Presidente de Cataluña) y Arnaldo Otegi (Líder de EH Bildu) apoyaron la moción de censura y quizá por ello han dicho esta semana que le volverían a apoyar después de las elecciones generales", afirmó Casado, para presentar al PP como la "única alternativa" al gobierno de PSOE que va a "echarse España a las espaldas y sacar" al país de la crisis.
En tanto, Pedro Sánchez aseguró que con la llegada del PSOE al Palacio a la Moncloa han "puesto rumbo a una España de justicia social" y "limpieza" que, además, ha "desterrado la corrupción". Sin embargo, Casado y Rivera, siguieron atacado por sus pactos con los independentistas.
Así también, recalcó lo hecho durante su gestión y criticó que "la derecha" diga que todo iba "maravillosamente bien" hasta que los "malvados socialistas" hicieron una moción de censura en España.
En tanto, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, indicó que los debates deberían ser obligatorios y ha agradecido a los trabajadores de RTVE, la televisión pública española, su defensa de la independencia editorial, esto tras acusaciones contra Sánchez de injerir en la línea editorial del medio público.
La ausencia de la ultraderecha
La exclusión del debate al líder del partido de extrema derecha Vox, Santiago Abascal, debido a que no cuenta con representación parlamentaria según la Junta Electoral Central, abrió una herida entre sus seguidores, que han incendiado las redes con memes en los que Abascal aparece como un superhéroe que salva España de los enemigos de la patria: los inmigrantes, los homosexuales, las feministas y los comunistas, entre otros.
Abascal aseguró en una entrevista televisiva que “jamás se tomaría un café con Pablo Iglesias”, el líder de la extrema izquierda española; augurando así un ambiente crispado en el Congreso de los Diputados tras las elecciones de este domingo.
Así también, en una entrevista concedida a El Mundo, que “El PSOE se ha convertido en un partido de corte totalitario” y que están siendo atacados por “la dictadura progre”.
Las propuestas de Vox
Entre las propuestas electorales de Vox, se encuentra la prohibición de que la sanidad pública cubra las intervenciones quirúrgicas “ajenas a la salud”, como el aborto y el cambio de género; la deportación de los inmigrantes ilegales a sus países de origen; la derogación de la Ley de Violencia de Género, por considerar que no existe tal cosa, que provoca "una guerra de sexos" y que es una manera para imponer las tesis del feminismo radical; y la edificación de un muro “infranqueable” en Ceuta y Melilla para evitar la entrada de migrantes africanos.
¿Qué dicen las encuestas?
Los últimos sondeos de cara a las elecciones legislativas españolas confirman la victoria del gubernamental Partido Socialista (PSOE); sin embargo, los socialistas del actual presidente, Pedro Sánchez, necesitarán pactar con otros partidos para poder asegurar una mayoría de gobierno en que no despejan las incógnitas sobre la amplitud de ese triunfo o sobre posibles mayorías de gobierno.
El conjunto de encuestas divulgadas por los medios de comunicación entre el domingo y el lunes coincide de forma unánime en que el PSOE quedaría en primer lugar, con hasta 29 por ciento de los votos en promedio.
En segundo lugar quedarían el Partido Popular (PP) con 21 por ciento en promedio, Ciudadanos con 14 por ciento, Podemos con 13 por ciento y Vox con apenas 9 por ciento; el restante serán para los partidos locales.
Alternativa uno
Si el PSOE opta por un pacto de izquierda, los sondeos atribuyen a Podemos una importante caída, por lo que perdería más de la mitad de sus 71 diputados actuales. Con ello sería necesario pactar además con los nacionalistas vascos (PNV) y la izquierda de la región de Valencia (Compromís).
Esa combinación podría ser suficiente para formar una mayoría. Pero otras encuestas consideran que no sería suficiente, por lo que haría falta además sumar a alguno de los partidos independentistas catalanes, lo que complicaría la ecuación.
Alternativa dos
Si el PSOE pacta con Ciudadanos, la suma de ambos partidos por encima de la mayoría absoluta, que es de 176 diputados, algo que ya que prácticamente todos los sondeos sitúan marcaron esa alianza. Sin embargo, Albert Rivera ha afirmado de forma reiterada que jamás pactará con Pedro Sánchez.
En el debate, Pablo Iglesias mencionó la apertura de Podemos para formar gobierno con el PSOE, pero cuestionó sobre una posible coalición con el partido Ciudadanos de Albert Rivera.
“Nosotros estamos dispuestos a hacer el gobierno que se espera pero la opción de que PSOE y Ciudadanos pacte también está ahí, por eso le digo al señor Sánchez que diga si va a pactar con Rivera", refutó Iglesias.
Sánchez afirmó que “si ganan las derechas harán lo mismo que en Andalucía y esta peligrosa realidad es la que hay que evitar. Hay que tener cuidado con la ultraderecha”.
Alternativa tres
Por su parte, Albert Rivera aseguró que buscar formar un gobierno con Pablo Casado, aunque advirtió de querer “tender la mano al PP pero sin que pacten con los nacionalistas”.
Casado afirmó posteriormente que Rivera “No es su adversario”. Y aseguró que no pactaría con los nacionalistas “los que están con ellos (el PSOE) o con el señor Iglesias”.
Las encuestas prevén a Vox como un papel clave para facilitar la investidura de Pablo Casado o de Albert Rivera, como ya ocurrió en Andalucía, convirtiéndose el bloque en una amenaza directa para el bloque de izquierdas, representado por PSOE y Podemos.
Pedro Sánchez, ha bautizado como el “eje de la involución” a los tres partidos de derechas y pide el voto a los indecisos para “evitar el retroceso de la sociedad española”. Al final del debate aseguró que vio “a una derecha sin proyecto, solo con mentiras e insulto”.
dmr