Los medios cubanos volverán a desplegar la publicidad comercial a partir de una nueva ley de comunicación social, luego de más de medio siglo de estar centrados en la propaganda política, según confirmaron directivos del flamante Instituto de Información y Comunicación Social del país.
“Las normas elaboradas al respecto contemplan restricciones para temas como las bebidas alcohólicas, los cigarros, los alimentos y los medicamentos”, informó a la televisión estatal Onelio Castillo, vicepresidente del instituto.
Puntualizó que no se permitirán más de tres minutos de contenido publicitario por hora. “Eso significa que una emisora de radio que tiene 18 horas de transmisión no puede tener más de 54 minutos de publicidad”.
“También hay un tiempo reglamentado para los distintos anunciantes; tampoco un anunciante puede concentrar mucho más tiempo en detrimento de otros”.
Tras el triunfo de la revolución en 1959, Cuba se convirtió en el único país de América en el que los periódicos, la televisión y la radio son controlados por el Estado.
“No puede existir publicidad y patrocinio en Cuba, y dentro del patrocinio mecenazgo, si no hay una relación contractual establecida con obligaciones, conforme a la legislación cubana en materia de contratación económica y a otros elementos que se fijan en la ley y también están de alguna manera reiterados en el reglamento, que tienen que ver con la licitud de las fuentes de financiamiento para realizar acciones de publicidad y patrocinio”, comentó el directivo.
Como parte de la apertura que tienen lugar en el país, hace aproximadamente un mes la web oficial Cubadebate publicó una nota publicitaria sobre una heladería privada que opera en La Habana, despertando el asombro y el rechazo de muchos lectores por el alto costo de ese alimento en el comercio publicitado.
Bajo el título “Publicidad” la web oficial también promocionó una marca de pinturas “para todo propósito”.
Reglamento rígido
Acerca del reglamente sobre la publicidad y el patrocinio, Castillo dijo que es “extenso, con 182 artículos” y que cuenta con “muchísimos campos”.
Será “un instrumento de estudio fundamental” y su aplicación demandará “un gran trabajo de atención, de capacitación, de superación, de conocimiento, para lograr que todo esto se garantice con mucha fuerza e intensidad”.
“No tendría ningún sentido que nosotros empezáramos a hacer desordenadamente publicidad y patrocinio sin antes conocer cuáles son las pautas de la ley y el reglamento y cómo eso se puede cumplimentar a partir de un ejercicio razonable, responsable”.
La nueva ley: ventana a la promoción del incipiente sector privado
Al amparo de las reformas que se realizan en el país, se han aprobado más de ocho mil pequeñas y medianas empresas privadas, también por primera vez en medio siglo, y sus dueños esperan que el nuevo reglamento les facilite su promoción.
La Ley de Comunicación Social fue aprobada en mayo pasado.
“La sociedad cubana ha asumido desde la gestión del gobierno y desde la labor del Partido (Comunista) a la comunicación social como un pilar de su gestión y del trabajo político ideológico. Estamos hablando también de un elemento indispensable para sostener la prosperidad y el desarrollo de la nación. Ante ese escenario se hacía imprescindible una normativa como la recién aprobada”, se estima oficialmente.
LG