En los últimos días, Sudán, el país más joven del mundo, ha sido escenario de fuertes conflictos armados entre miembros del ejército y de milicias paramilitares conocidas como Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF, por sus siglas en inglés) que han cobrado la vida de al menos 100 personas.
Además de los fallecidos, alrededor de mil 100 civiles y soldados han resultado heridos en medio de las balaceras sucedidas en la capital.
En MILENIO, te explicamos qué está pasando en Sudán.
¿Cómo inició el conflicto?
Los enfrentamientos empezaron hace dos días cuando miembros de la RSF fueron distribuidos a lo largo del país, cosa que el ejército sudanés interpretó como una amenaza contra el actual gobierno militar.
Tras meses de fuertes tensiones entre ambas partes que retrasaron el ambiente para celebrar elecciones en el país, los enfrentamientos se concentraron en la capital donde el grupo paramilitar RSF dice haber tomado la sede de gobierno del país.
Ciudadanos y militares han afirmado a medios que nunca se han visto enfrentamientos de tal magnitud.
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¿Quiénes son los responsables del conflicto?
Aunque no está claro quién empezó a disparar en contra del otro ejército, la ciudadanía y diplomáticos apuntan a que es un conflicto entre los líderes militares del ejército de Sudán y los grupos paramilitares.
Abdel Fatah al Burhan y Mohamed Hamdan Daglo son los nombres de los generales que se enfrentan ahora por el control del país; el primero dirigente del país desde el golpe de Estado de octubre de 2021 y el segundo líder de los grupos paramilitares.
Abdel Fatah al Burman de 62 años, se alzó como como una de las pocas figuras que generaba un consenso para liderar al país tras el derrocamiento del dictador Omar al Bashir.
Durante este proceso, al Burman contaba con el apoyo de su hoy rival político y militar Mohamed Hamdan Daglo, también conocido como Hemedti.
¿Quién es el general Al Burhan?
El general Al Burhan es acusado por sus adversarios, incluido su antiguo aliado, de ser un caballo de troya de los islamistas y caciques de la época de al Bashir, que gobernó el país con mano de hierro durante 30 años.
Tras la caída de Bashir en 2019, al Burhan dirigió el Consejo Soberano junto a los partidos políticos civiles para encaminar el país hacia la democracia.
Pero antes del golpe, el general, que pasó por las academias militares de Sudán, Egipto y Jordania, detuvo a casi todos los ministros y responsables civiles.
Sus hombres lo describen como "un comandante que sabe liderar sus tropas", según aseguró un oficial a la agencia AFP en el momento del golpe.
General Mohamed Hamdan Daglo
Nacido en 1975, en una tribu árabe en la frontera con Chad, Mohamen Hamdan Daglo, líder de las RSF logró crear aliados en Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita tras enviar sus hombres a combatir en Libia o en el seno de la coalición militar liderada por Riad en Yemen.
Las RSF controlan numerosas minas de oro y Estados Unidos asegura que cuentan con el apoyo de los paramilitares rusos del grupo Wagner, mismos que luchan en la guerra de Ucrania.
A lo largo de los años, Hemedti se ha impuesto como un actor clave en el país. A inicios de los 2000, era apenas el jefe de una pequeña milicia del Oeste.
Pero tras numerosas batallas, incursiones y otras atrocidades que le valieron al dictador al Bashir acusaciones de crímenes de guerra, el general logró hacerse un hueco en la cima del poder.
Cientos de miles de muertos después, Hemedti logró ampliar su esfera de influencia desde esta región, donde aún tiene sus cuarteles, hasta Jartum. Sus hombres, integrados en las RSF, intentan ahora arrebatar el poder al ejército.
Desde hace meses, usa las redes sociales para dirigirse a los más jóvenes, en un país en el que dos tercios de la población tiene menos de 30 años.
aag