Un alza en el precio del gas licuado ha provocado una ola de violencia que se ha desatado en Kazajistán, siendo su capital, Almaty, la principal zona del descontrol que ha dejado personas muertas, vehículos calcinados, edificios destruidos, casquillos de balas en las calles y una inestabilidad en una nación que tiene una independencia de sólo tres décadas.
En las siguientes líneas te explicamos qué está pasando en el territorio ubicado en la zona central de Asia, cuándo ocurrieron las protestas y qué han dicho las autoridades locales e internacionales ante los hechos que afectan a un lugar que alguna vez fue república soviética.
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¿Qué está pasando en Kazajistán?
Fue el 2 de enero de este año cuando comenzaron a ocurrir las manifestaciones ante el alza en el precio del gas licuado, el principal combustible automotriz que se usa en Kazajistán.
A partir de este año, el precio del gas licuado, que además es muy utilizado para cocinar y la calefacción, se duplicó hasta alcanzar los 120 tenge por litro (poco más de 5.5 pesos), un aumento significativo en un país en el que el salario mínimo es de 42 mil 500 tenge al mes (alrededor de dos mil pesos).
Entre el martes y ayer los disturbios se llegaron a ser tan grandes que los manifestantes tomaron sedes administrativas y protagonizaron graves actos de vandalismo.
Más de una decena de personas ha muerto y cerca de mil resultaron heridas en las protestas originadas el 2 de noviembre por el principal combustible del país
En estos días, el número de muertos por las protestas afectan tanto a civiles como a los integrantes de las fuerzas de seguridad del país, aunque hay una cifra inexacta por el lado de los manifestantes.
"Decenas de atacantes fueron liquidados. Establecemos sus identidades", afirmó la portavoz de la policía de Almaty, Saltanat Azirbek, sin especificar el número exacto y siendo citada por Interfaz-Kazajstán, donde además agregó que se trató de una "operación antiterrorista".
Mientras que el canal de televisión estatal Jabar 24, el cual citó fuentes de la alcaldía de Almaty, informó que "trece agentes del orden murieron, los cuerpos de dos de ellos fueron hallados decapitados" tras las manifestaciones.
Según la misma información, del total de uniformados muertos, diez fallecieron la ayer, 8 durante los disturbios y otros dos durante la toma del aeropuerto por los manifestantes.
Los manifestantes atacaron e incendiaron varios edificios administrativos, incluyendo el ayuntamiento y la residencia presidencial, de la cual todavía emana humo, constató el jueves un periodista de la AFP.
¿Cuál es la situación de Kazajistán?
Kazajistán, un país rico en recursos naturales, era considerado como uno de los más estables de Asia central. Desde 1989 hasta 2019, estuvo bajo la férula del presidente Nursultán Nazarbáyevm quien transmitió ese año el poder a Kassym Jomart Tokayev, considerado como su fiel discípulo.
Pese que el actual presidente prometió reformas, el país ha visto pocos cambios desde su llegada al poder.
Los manifestantes han explicado que la indignación se gestó durante mucho tiempo y en los últimos días en las protestas se escucharon consignas como "¡Fuera el viejo!", en referencia a Nazarbáyev, de 81 años. Este tipo de manifestaciones era inconcebible hasta hace poco.
Los críticos del ex presidente lo acusan de haber gestado una corrupción generalizada y tomando esos recursos y favorecer a su familia, que tiene ostentosas residencias en el extranjero.
"Nuestro Kazajistán fue trasformado en una empresa privada de Nazarbáyev", se quejó Saule, una trabajadora de la construcción de 58 años, que participó en las movilizaciones, afirmó que quedó consternada cuando las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los manifestantes.
Ella misma dijo que con otros manifestantes "vimos muertos (...) De pronto, mataron a diez personas", siendo un hecho por el que muchos habitantes de Almaty ahora temen una forma de autoritarismo más duro.
"Teníamos una seudolibertad", dijo Sultan, de 29 años. "Pero ahora, incluso eso se terminó", agregó.
El monumento erigido en honor a Nazarbáyev fue derribado hoy en la ciudad kazaja de Taldikorgán por los manifestantes, donde se han revelado fotos de los restos del monumento, las cuales fueron publicadas en varios canales de Telegram que informan sobre los disturbios que sacuden al país, después de que el canal Ateo Breaking mostrase un vídeo en el que los manifestantes intentaban derribar la estatua.
¿Qué ha hecho el gobierno de Kazajistán ante las protestas?
Como forma de aplacar a los manifestantes, el presidente cambió a su gabinete, limitó el alza de los precios del gas y luego recurrió a la fuerza, pidiendo un despliegue de tropas lideradas por Rusia.
El gobierno también instauró el estado de emergencia y un toque de queda nocturno, pero hoy los habitantes de Almaty deambulaban por la plaza del ayuntamiento, pese a que se escuchaban ráfagas de tiros.
Todavía salía humo de varios edificios, en medio de coches calcinados y de comercios saqueados, entre ellos una tienda de armas de caza, que según los transeúntes fue desvalijada por manifestantes que querían enfrentar a la policía.
En la noche, las redes sociales se llenaron de videos en los que se oyen gritos y ráfagas de armas automáticas y se ve a personas huyendo, después que las autoridades lanzaran la operación de seguridad.
¿Qué dice la comunidad internacional ante lo que pasa Kazajistán?
Mientras que el secretario estadounidense de Estado, Antony Blinken, trasladó a su homólogo kazajo, Mukhtar Tileuberdi, el apoyo de su país "a las instituciones constitucionales de Kazajistán y a la libertad de prensa" en la nación.
El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, informó en un comunicado de la llamada telefónica entre ambos responsables, en la que Blinken abogó por "una resolución pacífica a la crisis que respete los derechos humanos" en el país centroasiático.
En tanto, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, dijo que el bloque continental vigila "con cautela" la llegada de tropas extranjeras a Kazajistán, que solicitó ayuda de la alianza militar postsoviética OTSC para restablecer el orden en el país.
"Esperamos que la presencia de fuerzas internacionales no socave la independencia de Kazajistán", dijo Borrell, quien se encuentra de visita oficial en Ucrania.
Por su parte, Rusia calificó los disturbios en Kazajistán como un intento de socavar la integridad del país "inspirado desde el exterior" y defendió la participación de las fuerzas de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) en el proceso de "pacificación" de las protestas.
"Vemos los últimos sucesos ocurridos en este país amigo como un intento inspirado desde el exterior de socavar violentamente la seguridad e integridad del Estado con la participación de formaciones armadas, preparadas y organizadas", dijo el Ministerio de Exteriores de Rusia en un comunicado.
Recordó en la misma nota que el Consejo de Seguridad de la OTSC tomó hoy la decisión de enviar "fuerzas pacificadoras" a Kazajistán por un "período de tiempo" limitado con el fin "de estabilizar y normalizar la situación del país", sacudido por violentas manifestaciones desde el martes pasado.