Melissa Sloan, una madre de familia que vive en Gales, Reino Unido, acusó que ha sufrido discriminación ya que al buscar trabajo no es contratada debido a sus tatuajes que le cubren incluso el rostro.
En entrevista con el diario británico Daily Star, contó que su primer tatuaje se lo hizo a los 20 años y desde entonces no ha parado de hacerse más, entre ellos destacan tatuajes de telas de araña en los senos.
La mujer tiene 45 años y dos hijos. Su tatuador es su novio, quien en casa le hace diseños al "estilo de prisión". Asimismo, destacan en su cuerpo imágenes como los gemelos Kray en su pierna, conejitos de Playboy y hojas de mariguana en la cabeza.
“Es como cuando tomas un cigarrillo o una bebida, te vuelves adicto. No puedo detenerlo ahora, es adictivo, para mí de todos modos. Simplemente no puedo detenerlo", contó según Daily Star.
El gusto por tatuarse la ha llevado de traer consigo una pistola (de tatuajes). Sin embargo, al buscar trabajo, le han negado uno, pero expresa que si alguien le ofreciera un empleo mañana, aceptaría la oferta.
“Solicité un trabajo limpiando baños donde vivo y no me aceptan debido a mis tatuajes" .
“El primer trabajo que tuve fue limpiando hace mucho tiempo, limpiando baños. La gente ha dicho que nunca he tenido un trabajo en mi vida, lo tuve una vez y no duró mucho.
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