Renata Rojas, nacida en la Ciudad de México, fue la primera mexicana en sumergirse en el océano y viajar en el submarino Titán para conocer el Titanic, famoso barco que se hundió en 1912 con mil quinientas personas a bordo tras golpear un iceberg.
Su amor por el mar inició cuando era muy pequeña, ya que su papá era un buceador profesional y él le enseñó a nadar, y lo que debía saber sobre el mar y el buceo, en Cozumel, México.
Medios han señalado que su sueño por conocer el Titanic surgió después de que vio la película La última noche del Titanic, la cual se estreno en 1958 y fue dirigida por Roy Ward Baker e interpretada por Kenneth More y David McCallum.
A raíz de su deseo por conocer el Titanic, su familia decidió mudarse a Estados Unidos para que Rojas pudiera estudiar algo relacionado con sus aspiraciones, por lo que al final se decidió por Oceanografía, además, para su fortuna, en esas fechas de 1985 llegó la noticia de que los restos del Titanic fueron hallados.
Ante esto Rojas comenzó a investigar sobre las expediciones que se realizarían en el Titanic, sin embargo, en ese entonces, le habían señalado que ya no se realizarían más viajes en busca del barco.
Por otro lado, la mexicana, a los 18 años, atravesó por un cambió de carrera profesional, ya que algunas personas le señalaron que las mujeres no podían estudiar ciencias, por lo que tuvo que cambiar de Oceanografía a Banca.
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Y aunque pareciera que el sueño de la mujer por conocer el mar estaba siendo truncado no fue así, debido a que posteriormente surgieron noticias sobre que sí se realizarían algunas expediciones en el mar y fue ahí cuando comenzó a ahorrar dinero.
Al mismo tiempo, la mexicana buscó otras formas para visitar el Titanic, entre ellas se acercó con el director James Cameron para decirle su deseo de conocer el Titanic.
No obstante, Renata Rojas tuvo que ahorrar por más de 30 años para que conociera a Ocean Gate, quien se encarga de realizar viajes con la ayuda de un submarino para llegar al interior de mar y así conocer el icónico navío.
Al inicio sus planes eran conocer el submarino en 2019, pero por la pandemia del Covid-19 no se logró y fue hasta 2022 cuando cumplió sus sueños al viajar en el Titán.
“¡Los sueños pueden hacerse realidad! Privilegio de ver el Titanic con mis propios ojos el 19 de julio de 2022. Primera mujer mexicana en bajar y por la bandera de la Royal Canadian Geographical Society”, escribió Renata en su Twitter.
APC