"No estamos sintonizando adecuadamente con las demandas y anhelos de la ciudadanía", eso dijo el presidente de Chile, Sebastián Piñera, luego de los resultados de la histórica votación que determina a los redactores de la nueva Constitución Política del país y en el que los bloques cercanos a su gobierno fueron los menos favorecidos por la ciudadanía.
Chile tuvo hoy la segunda parte de la doble jornada de votación que se realizó ayer y que, entre otros cargos, seleccionaba a las 155 personas que se encargarán de redactar la ley base, la cual estableció un mecanismo de paridad de género y 17 cupos reservados a integrantes de los pueblos originarios.
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La frase de Piñera surge luego de un año y medio desde que se iniciaron una serie de protestas tras el alza en un área del transporte público de Santiago de Chile, las cuales se extendieron por todo el país agregando demandas sociales claves, como salud, educación y pensiones.
En contra de todo pronóstico, especialmente oficialista, y con más del 70 por ciento de los sufragios escrutados, los independientes y la oposición obtendrían más de dos tercios de los escaños, mientras que la derecha, bloque adherente a Piñera, sería la gran afectada al conseguir menos de un tercio de la convención, el porcentaje necesario para influir en el texto de la nueva Constitución Política y vetar artículos.
"En estas elecciones, la ciudadanía nos ha enviado un claro y fuerte mensaje al gobierno y también a todas las fuerzas políticas tradicionales: no estamos sintonizando adecuadamente con las demandas y los anhelos de la ciudadanía y estamos siendo interpelados por nuevas expresiones y por nuevos liderazgos", dijo Piñera.
Agregó que "estamos siendo interpelados por nuevas expresiones y liderazgos. Es nuestro deber escuchar con humildad y atención el mensaje de la gente".
La nueva Constitución Política de Chile reemplazará a la actual, que fue heredada bajo la dictadura de Augusto Pinochet, la cual es consignada como una de las principales causantes del sistema que generó marcadas desigualdades sociales en los más de 30 años de funcionamiento en la legislación de ese país.
"Se está reconfigurando el sistema político, hay nuevos aires para Chile, pero también es complejo porque se requerirá negociar con cada uno los independientes y lidiar con cada una de sus posturas dentro de la Convención Constituyente", dijo Mireya Dávila, académica del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile.
Los resultados dejan claro "que la fuerza electoral de los independientes es mucho mayor de lo que una pensaba y eso confirma que la ciudadanía está harta de los partidos tradicionales".
OMZI