La fuerte ola de contagios y fallecidos con covid-19 en Tailandia continúa en ascenso al registrar este miércoles 20 mil 200 casos y 188 muertos, nuevos registros récords, a pesar de las fuertes medidas impuestas sobre Bangkok y otras 29 provincias.
El rebrote, vinculado a la variante Delta del virus, ha llevado al gobierno tailandés a imponer el toque de queda nocturno, la limitación de reuniones a cinco personas y el cierre de restaurantes, centros comerciales y otros establecimientos.
Las autoridades, de momento, descartan aprobar un confinamiento de 24 horas y restricciones más estrictas contra el brote detectado en abril y que desde entonces acumula más del 95 por ciento de los 672 mil 385 casos registrados desde el inicio de la pandemia, y suma el 98 por ciento de los 5 mil 503 fallecidos.
Los hospitales de la capital, epicentro de la actual ola, se encuentran al borde del colapso con camas habilitadas en los aparcamientos y, en algunos centros, hasta en contenedores de mercancías modificados como espacios para tratar a pacientes.
La crisis sanitaria en Tailandia además se ve afectada por el lento avance de la campaña masiva de vacunación anticovid, que no logra coger un ritmo constante en la administración de las vacunas por la falta de suministro.
En un comunicado, la farmacéutica AstraZeneca indicó el martes que durante julio ha entregado a Tailandia un total de 5.3 millones de dosis.
El país, que también ha usado ampliamente la vacuna china Sinovac, ha administrado con la pauta completa solo a alrededor del 6 por ciento de la población, mientras que sólo el 21 por ciento cuenta con al menos una dosis.
JLMR