Turquía comunicó a las Naciones Unidas que, a instancias de su presidente, desea a partir de ahora llamarse "Türkiye" en todos los idiomas, anunció el jueves la ONU.
"El cambio es inmediato", dijo Stephane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, Antonio Guterres. Precisó que fue una carta oficial de Ankara recibida el miércoles en la sede de la ONU la que formalizó de inmediato el cambio de nombre de Turquía.
El martes, el ministro de Relaciones Exteriores de Ankara, Mevlüt Cavusoglu, publicó en su cuenta de Twitter una carta dirigida al secretario general de la ONU exigiendo que "el nombre de (su) país en la ONU, en idiomas extranjeros, se registre como "Türkiye".
Ankara evita así que el nombre del país en inglés sea "Turkey", una palabra que en ese idioma también significa "pavo" y que por lo tanto podría adquirir una connotación negativa.
El jefe de la diplomacia turca se refirió en su tuit al deseo del presidente Erdogan, desde finales de 2021, de "aumentar el valor de marca" de su país. De hecho, en materia económica, Ankara lleva varios años queriendo imponer internacionalmente la marca "made in Türkiye", en detrimento del "Made in Turkey".
"Algunos pueden encontrar este cambio de nombre tonto, pero coloca a Erdogan en el papel de protector y salvaguarda del respeto internacional por el país", analiza Mustafa Aksakal, profesor de historia en la Universidad de Georgetown en Washington D.C., citado este jueves por el diario The New York Times.
El periódico recuerda que en junio de 2023, cuando Erdogan cumpla 20 años en el poder, Turquía celebrará elecciones presidenciales y también el centenario de su fundación tras el desmantelamiento del Imperio Otomano.
RM