Un agresor suicida detonó un dispositivo explosivo en el corazón de la capital turca, Ankara, apenas unas horas antes de que el parlamento reanudara sus sesiones tras un receso estival. Un segundo agresor murió en un tiroteo con la policía.
Dos policías sufrieron heridas leves en el ataque cerca del Ministerio del Interior, según dijo el ministro, Ali Yerlikaya, en X, la red social antes conocida como Twitter.
El suceso ocurrió cuando el parlamento iba a retomar su actividad después de tres meses con un discurso del presidente, Recep Tayyip Erdogan.
En un primer momento no había información inmediata sobre los atacantes. Grupos kurdos, milicianos de ultraizquierda y el grupo Estado Islámico han realizado ataques mortales en el país en el pasado.
Los agresores llegaron al lugar en un vehículo comercial ligero, de acuerdo con el ministro del Interior.
Imágenes de televisión mostraban a equipos policiales de explosivos trabajando cerca de un vehículo estacionado en la zona, cerca de la Gran Asamblea Nacional Turca y otros edificios del gobierno. En el suelo cerca del vehículo se podía ver un lanzacohetes.
El ministro de Justicia, Yilmaz Tunc, dijo que se había abierto una investigación sobre el “ataque terrorista”.
“Estos ataques no mermarán de ninguna forma la lucha de Turquía contra el terrorismo. Nuestra lucha contra el terrorismo continuará con más determinación”, escribió en X.
La policía acordonó el acceso al centro de la ciudad e incrementó las medidas de seguridad, y advirtió a la población que se harían explosiones controladas de paquetes sospechosos.
Los dos agentes eran atendidos en un hospital y no estaban graves, según medios.
Reacciones internacionales
Egipto, que ha normalizado los lazos con Turquía tras una década de tensiones, condenó el ataque. Un breve comunicado del Ministerio de Exteriores expresó la solidaridad de Egipto con Turquía.
La embajada estadunidense en Ankara también condenó el ataque y transmitió su solidaridad a Turquía.
Había expectación internacional sobre el discurso de Erdogan y si ofrecería indicios de cuándo podría ratificar el parlamento turco la membresía sueca en la OTAN.
Suecia y Finlandia pidieron entrar en la alianza tras la invasión rusa de Ucrania el año pasado. Aunque Finlandia ya se ha incorporado, Turquía bloqueó el ingreso de Suecia y acusó al país de ser demasiado laxo con grupos que Turquía considera amenazas de seguridad.
Sólo Turquía y Hungría tienen pendiente la ratificación de Suecia.
SNGZ